El pueblo que susurraba a las estrellas

En ocasiones encontrar un nuevo atractivo turístico para una localidad es tan sencillo como mirar hacia el cielo. Eso mismo pensó el municipio soriano de Muriel Viejo, que desde diciembre es el primero de Castilla y León con el sello internacional Starlight, que lo certifica como un punto óptimo para la observación astronómica por la limpieza de su cielo. Hasta ahora sólo el norte de Gredos había logrado esta catalogación, pero este pequeño núcleo se convierte en el primer núcleo concreto en hacerse con la distinción.

Su alcaldesa, Ana Bárcena, explica que además son el municipio más pequeño del mundo en lograrlo, por lo que desde Starlight siguen con interés su apuesta por el crecimiento turístico. Todo surgió porque «vivo en las afueras del pueblo y en una zona más oscura, y a veces salía a ver las estrellas».

Eso prendió la idea de aprovecharlas como recurso. «Unos amigos de Burgos aficionados a la astronomía me dijeron ‘igual es mejor que empieces logrando la certificación’». Hoy ese consejo ha puesto a esta localidad de apenas 86 habitantes (pero con bastantes jóvenes y actividad) en el mapa. La primera observación ya con el sello se realizó «con los niños de la localidad». Además, dos jóvenes del pueblo se han formado en el observatorio astronómico de La Palma para poder ayudar a los visitantes.

Entre los méritos está una contaminación lumínica mínima, la apuesta por que el alumbrado público no afecte a la visión de los cielos y sea eficiente, la habitual ausencia de nubes y sobre todo una de las atmósferas más puras y naturales de toda la Península Ibérica.

La primera piedra de toque llega en mayo, con un grupo de más de 20 personas que estrenará oficialmente el proyecto Starlight. De su mano comienza «un reto» para hacer crecer las infraestructuras turísticas. En la zona de Las Novillas ya existe una zona de campamento frecuentada por Scouts, pero gracias a una reciente subvención se van a mejorar las instalaciones para que puedan albergar a otro tipo de grupos, como el de los aficionados a las estrellas. No obstante, el grupo inicial ya se alojará en establecimientos de la zona, repercutiendo directamente en su economía.

Y es que este proyecto no es una consecuencia, sino un motor de desarrollo. Desde la iniciativa privada «ya han presentado iniciativas con mayor o menor idea y algunas tienen muy buenas perspectivas. Ya hay personas que han pensado en invertir en Muriel» para aumentar esta oferta turística. Por la parte pública «desde el Ayuntamiento queremos hacer una plataforma de observación, señalizar los caminos, tematizar alguno de ellos» y ofrecer, en definitiva, una experiencia para «unir el cielo con el suelo».

Muriel Viejo también tiende la mano «a algún astrónomo que quiera acercarse para desarrollar algún proyecto» y los voluntarios para impulsar esta iniciativa son numerosos. «Lo que dicen los más conocedores es que el público del astroturismo suelen ser parejas y sobre todo mucha familia», principalmente animada «por los niños». Por ello la apuesta pasa por vincular actividades diurnas con las observaciones e ideas para todos los públicos. La primera «un curso de astrofotografía probablemente para mayo. ya han venido astrofotógrafos a hacer fotos y nos ha enganchado», así que van a hacer escuela.

Al ser una localidad muy pequeña, Starlight y la Organización Mundial del Turismo (OMT) siguen atentamente su crecimiento turístico «porque es un modelo muy replicable» de desarrollo de una pequeña zona rural. «Estrellas tenemos todos encima de la cabeza, sólo que algunos no las ven». Muriel Viejo entra ahí en acción ofreciendo uno de los mejores cielos para disfrutar de la Vía Láctea, y además con certificación oficial.

Además, esta coqueta localidad de Pinares sigue luciendo sus encantos bajo el sol. Los campamentos de Las Novillas; El Lagunazo con su variedad de reptiles y anfibios autóctonos; El Abedular, una de las escasas zonas de España donde florecen los protegidos narcisos; los picos de San Vicente, La Lastra y Peñota; la estela prerrománica; la portada románica que da acceso al cementerio... En definitiva, numerosos encantos que crecen cuando anochece. Gracias a Starlight, el pueblo brilla hasta de noche y desde ahora se puede comprobar en vivo.