Diario de Valladolid

Agroalimentación

La Guía Peñín reconoce con más de 90 puntos a 47 vinos de la Denominación de Origen Rueda

El promotor de esta guía, José Peñín, y el director de esta publicación, Carlos González, han presentado un nuevo trabajo editorial en la sede de la DO Rueda que incluye 10.808 vinos de toda España, Argentina, Chile y México

El experto español en vinos José Peñín, posa a las puertas de la sede del Consejo Regulador de la D.O. Rueda, momentos antes de presentar los resultados de la Guía Peñín de los Vinos de España 2015 para los caldos de esta zona vitivinícola-Nacho Gallego

El experto español en vinos José Peñín, posa a las puertas de la sede del Consejo Regulador de la D.O. Rueda, momentos antes de presentar los resultados de la Guía Peñín de los Vinos de España 2015 para los caldos de esta zona vitivinícola-Nacho Gallego

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EFE

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La Guía Peñín, uno de los manuales de vinos de España, ha situado a 47 vinos de la Denominación de Origen Rueda por encima de los 90 puntos, correspondientes a la cosecha de 2013, casi la mitad del pasado año, cuando alcanzaron 90 vinos.

El promotor de esta guía, José Peñín, y el director de esta publicación, Carlos González, han presentado un nuevo trabajo editorial en la sede de la DO Rueda, cuya añada de 2013 "ha sido muy buena, con un total de 318 vinos catados, y una puntuación media también muy buena, a pesar de haber bajado un punto -de 88,67 del pasado año a 87,77 del presente-", en palabras de González.

Peñín ha recordado que "a partir de 86 puntos, se puede hablar de vinos de una buena calidad y la media española es de 88, lo que indica que ha ido aumentando de forma paulatina, ya que hace sólo siete años esa media nacional era de 83,6, y es una calidad que viene para quedarse".

Esa puntuación recoge características como la armonía, el carácter varietal o el equilibrio enológico y, en este sentido, ha destacado "el mayor conocimiento" de los enólogos lo que, junto a la tecnología, han hecho que esa calidad "mantenga un crecimiento" en el caso de los vinos de Rueda.

En total se incluyen 10.808 vinos de toda España, Argentina, Chile y México "cantidad que convierte a esta guía en un buen termómetro para los consumidores, que son los que realmente importan, porque lo más importante es que ellos disfruten de los caldos", ha destacado Peñín.

De hecho, "el que las añadas sean cada vez más regulares a los que beneficia es a los consumidores, porque el canon de vinos aceptables cada vez va aumentando y hoy en día no hay ninguno que sea una bazofia y, en el caso de Rueda, la valoración precio-calidad es altamente satisfactoria".

"El que hace un mal vino es porque quiere, porque alguien se conforma con que se venda bien y no aspira a más y si se encuentra un vino defectuoso será por la botella, ya que la tecnificación hace imposible que los haya", ha detallado el periodista leonés quien ha recordado que, en los 25 años de vida de la guía, "no ha habido grandes diferenciaciones en cuanto a la calidad".

En opinión de González, "la calificación de buena, muy buena o excelente es la palabra morbosa, pero lo importante es que los vinos de Rueda han llegado a un gran nivel y el buen hacer tanto vitícola como enológico y las nuevas tecnologías hacen que difícilmente caigan al abismo al que hace 30 años podían caer".

"Lo normal es que los vinos buenos lo sean siempre, lo que pasa es que se van incorporando nuevas marcas", ha comentado Peñín, quien ha señalado que entre las dos denominaciones más destacadas de vinos blancos, la de Rías Baixas está "por encima" de la de Rueda, si bien el precio de los vinos de ésta "son más asequibles" y los caldos tienen "menos altibajos".

Por su parte, el presidente de la D.O Rueda, Pablo del Villar, ha recordado que la denominación "ha tenido un crecimiento sostenible los últimos diez años, pasando de 40 millones de botellas comercializadas a 90, con una calidad media cada vez más alta" y ahora se plantean "en qué dirección ir".

"Estamos en una encrucijada para ver si buscamos vinos de calidad aún más alta de lo que se hace aquí, lo que es difícil, o si queremos abrir el abanico a otras tipologías de vino, con sistemas de elaboración singulares -producciones limitadas, contacto con madera, elaboración con lías o fermentación en barrica", ha matizado.

El objetivo es, por tanto, "marcar un Plan Estratégico desde el que mirar hacia el futuro, que determine la tendencia a tomar, pero se ha de hacer con calma y tranquilidad, porque ese tipo de decisiones llevan tiempo", ha concluido Del Villar, quien no ha descartado que "pueda haber un cambio en el reglamento".

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