PERSONAJES ÚNICOS
El cirujano de la columna
Catedrático del Área de Traumatología y Ortopedia de la USAL celebra un cuarto de siglo de carrera profesional con su ingreso en la Real Academia de Medicina de Salamanca

El médico especialista en Traumatología y Cirugía Ortopédica en elCAUSA, Juan Francisco Blanco Blanco.
Más de un cuarto de siglo dedicado a aliviar el dolor y el sufrimiento. «Desde crío siempre quise ser médico, es algo que de niño, allí en mi pueblo soñaba con poder alcanzar». Un sueño que se ha cumplido con creces para el médico especialista en Traumatología y Cirugía Ortopédica en el Complejo Asistencial Universitario de Salamanca (CAUSA), Juan Francisco Blanco Blanco, que celebra 25 años de carrera profesional con su ingreso en la Real Academia de Medicina de Salamanca como nuevo académico de número.
«Mis primeros años los pasé en un ambiente rural, donde el pan llegaba cada 15 días y en la escuela había una maestra que daba clase a todos los cursos. Ciertamente, fui muy feliz, pero el horizonte del futuro se veía bajo ese contexto casi inalcanzable, soñando con poder dedicarme a la medicina», explica el catedrático del Área de Traumatología y Ortopedia de la Facultad de Medicina de la Universidad de Salamanca (USAL).
Su primer contacto con el mundo médico fue a través de un libro de su adolescencia titulado ‘Corazones’ que versaba de la actividad de dos cirujanos cardiacos, algo que le ayudó a «enfocar» su vocación. Asegura que siempre había tenido un gran interés por el ser humano en su conjunto y «especialmente por la persona que sufre», por ello, esta lectura resultó especialmente significativa para Blanco en su camino a convertirse en el profesional que es a día de hoy.
Tras doctorarse por la USAL en 2000 con la tesis ‘Estudio biomecánico y clínico de un vástago femoral con apoyo diédrico en la prótesis total de cadera sin cementar’ el catedrático se ha especializado en la patología de la columna vertebral, que incluye un gran número de enfermedades como la patología degenerativa, hernias discales, o afectaciones deformativas y tumorales.
«Durante mi especialidad compartí actividad con profesionales referentes en este ámbito, de hecho alguno de ellos es un referente mundial en cirugía vertebral, por ello cuando tuve la oportunidad para formarme en cirugía de columna me lancé a ello». Un trabajo que le llevó a incorporarse al CAUSA y poco a poco fueron poniendo en marcha una unidad especializada en la cirugía de la columna de la que se siente «muy orgulloso» de haber participado en su formación y desarrollo.
Durante estos 25 años ha seguido involucrándose en la investigación en este ámbito de tal manera que, además de su trabajo como médico especialista en Traumatología y Cirugía Ortopédica, es Jefe del Servicio del CAUSA, responsable de la unidad de investigación centrada en la ‘Patología musculoesquelética’ en el Instituto de Investigación Biomédica de Salamanca (IBSAL) y miembro del grupo de Investigación de ‘’Terapia Celular y Medicina Regenerativa’ de la USAL.
Dentro de esta última institución, ejerce como docente en los grados de Medicina, Fisioterapia y Terapia Ocupacional, así como cuenta con actividades investigadoras. «Estoy convencido de que lo relevante es que mi actividad no puede ni debe dividirse. Tengo una triple actividad, asistencial, docente e investigadora pero en una sola figura. Esas tres facetas son verdaderamente una, no se entienden sin las otras. No es posible ser un buen profesional asistencial sin actividad docente e investigadora y lo mismo pasa por ejemplo en la docencia clínica, no es posible desarrollarla correctamente si no hay actividad asistencial e investigadora etc», remarca.
En cuanto a su rama investigadora lleva unos años dedicándose a dos líneas de estudio principales. Una relacionada con la terapia celular, en concreto actualmente la está enfocando junto con su grupo de investigación a la terapia celular en artrosis de rodilla. Y otra línea de investigación principal relacionada con las fracturas osteoporóticas del anciano, una enfermedad que debilita los huesos causando una mayor propensión para que se den fracturas en áreas como la cadera o la columna vertebral.
Su último trabajo se ha centrado en el estado funcional de los pacientes ancianos con fractura de cadera y cómo se relaciona esa situación funcional con unos determinados genes. «Hemos recogido los datos de la incidencia de esta patología, su repercusión y luego hemos analizado los diversos factores que intervienen en ella así como factores pronósticos, ya que es una patología que conlleva con mucha frecuencia un cambio drástico en la vida de los pacientes, y también en sus familias, puesto que estas lesiones ocasionan una elevada mortalidad».
«Nuestro objetivo ha sido tratar de mejorar la situación de la población mayor y alertar sobre este grave problema de salud», incide. En este sentido explica que de cara al futuro quieren poner en marcha una iniciativa para la prevención, algo que creen que «podría mejorar la atención de los pacientes mayores».
Así, este estudio sigue el eje central en torno al que ha orbitado toda su carrera profesional. «El ser capaz de aliviar el dolor y el sufrimiento, es el motivo principal que ha guiado mi vocación como médico y cirujano», una motivación que ha impulsado este cuarto de siglo de trabajo que le ha llevado a ingresar el pasado mes de septiembre en la Real Academia de Medicina de Salamanca como nuevo académico de número.
Un hito en su carrera que Juan Francisco Blanco explica que tiene una «doble vertiente». Por un lado, «supone una enorme alegría y un honor, quizás inmerecido» y, por otro, «una gran responsabilidad» al integrarse dentro del área de la Cirugía a la Traumatología y Cirugía Ortopédica. «Desde un punto de vista personal y profesional ha sido uno de los acontecimientos más importantes para mí. Supone una especie de espaldarazo a esa labor que realizo cada día, a la vez que me compromete con la institución y también con el servicio público. De alguna forma es una manera de acentuar mi compromiso con la sociedad para la que trabajo en todos los sentidos asistencial, docente e investigador».