Monchu, el referente del Real Valladolid

El comienzo de Liga de Pezzolano es un tiovivo en el que se suben y bajan jugadores y formaciones, en busca del once y el dibujo ideal , los cuales aún no se vislumbran. Todo este traqueteo se ha cobrado suplencias y aupado titularidades. Pero hay jugadores que en este primer tramo de campeonato han sabido permanecer ajenos a los vaivenes , aguantado en la alineación  inicial los seis partidos de Liga. Entre ellos figura como gran destacado Monchu. El eje del carrusel.

El mediocentro palmesano es el jugador albivioleta que más tiempo ha consumido en la competición. Según  las cifras oficiales de LaLiga, acumula 515 minutos de los 540 oficiales. Sólo fue sustituido en Albacete, en el 65. Ningún  futbolista pucelano lleva pleno de minutos.

Monchu ha aprovechado las salidas de Mesa y Aguado para hacerse indiscutible. La temporada pasada alternaba titularidades con ellos. Ahora ha sumado galones y es la prolongación de Pezzolano en el campo, o al menos eso intenta el entrenador, entre sus bamboleos. El mallorquín está respondiendo, pero no de forma ideal. Nadie lo hace en el equipo. Aun así logra moverlo y ha marcado un gol, en el debut frente al Sporting.

Los otros cuatro jugadores que han disputado los seis partidos son Escudero, Iván Sánchez, Kenedy y Moro. Los dos primeros son los únicos titulares en todos, junto a Monchu. 

Escudero (486 minutos) se beneficia de que el otro jugador en su puesto está recién llegado del filial y aún conserva ficha del segundo equipo: Garri. El iscariense apunta muy alto. Ya es internacional su b 19, pero aún está por hacer.

Iván Sánchez (469) es un jugador también del gusto de Pezzolano, regateador y capaz de jugar de mediocentro, interior o mediapunta. Por ahora le falta esa aceleración final y el gol, pero su calidad para Segunda y alternativas con el balón en los pies le convierten en importante, aunque no esté siendo decisivo.

Kenedy (409) ha sido metido con calzador por Pezzolano tras su frustrado traspaso a Olimpiakos. La idea del míster es que el brasileño sólo puede mejorar con ritmo de juego y para lograr ese progreso ha realizado antes partidos infumables. Sólo completó el de Albacete. En los demás fue titular o suplente.

El de Moro (300) es el suceso más inexplicable de la plantilla, pues no se entiende su infrautilización. El único jugador con regate rompedor de la plantilla (el filial Tunde aparte) se vio relegado al banquillo al jugar el equipo con 3-5-2 y ocupar los laterales la banda.

Estos dos peculiares casos provocan que Luis Pérez, con cinco partidos disputados, atesore más minutos (425) que ambos. El lateral derecho ha sido titular en todos ellos y sólo fue reemplazado en uno. 

Del resto de jugadores nadie llega a los 400 minutos, con titularidades muy repartidas y Javi Sánchez sin debutar por lesión. El asentamiento de la plantilla debe provocar onces más repetidos.