El ciclón arrasa el ring

El vallisoletano Salvi Jiménez ha desembarcado en el terreno profesional para reclamar como suyo ese territorio. ‘El ciclón’ arrasa allí por donde pasa. Lo hizo en amateur, donde estuvo más de dos años sin hincar la rodilla en la lona, y ahora en profesional, campo en el que lleva un récord de cinco victorias en otros tantos combates.

‘Invictus’ Jiménez ha desatado la tormenta perfecta. En diez meses -debutó 2 de febrero de este año en Bilbao- ha pasado de subir por primera vez las escalerillas hacia el ring profesional a convertirse en un serio candidato al campeonato de España. La historia no ha hecho más que escribir su primer capítulo. «Pasar a profesional me ha venido bien para demostrar mi forma física y todo lo que tengo», entiende el púgil.

Reynaldo Mora, Edwin Téllez-por partida doble-, Josué Bendana y Álex Mora han sido las ‘víctimas’ de un vallisoletano que sueña con pelear en Las Vegas; un sueño que lleva horas de vuelo sobre el ring que ya ha empezado a construir de la mano de su promotora MGZ.

Su irrupción sorprendente para los que no le conocían, pero no para Salvi: «Me lo esperaba... y más que me queda. Ya le he dicho a mi promotora que quiero pelear con los mejores. En España nadie me va a meter mano», asegura. Aunque el deporte es una ciencia inexacta, los números avalan al púgil, que en tres años y más de 200 peleas sólo ha sido superado en cinco ocasiones -cuatro de ellas en combates internacionales-.

Salvi Jiménez no ha perdido el ‘gancho’ de su boxeo, pero ha tenido que reciclarse ante un nuevo hábitat en el que Valladolid no tenía representantes desde Chuchi López -cuando se retiró, Salvi aún no había debutado como amateur-. «Ahora soy un boxeador más maduro. Ya no puedo salir a tope, porque sabes que son seis u ocho asaltos y no puedes tener esa chispa, hay que pensar más», analiza.

Para el púgil pucelano la siguiente meta será el campeonato de España. «No puedes aspirar con menos de ocho peleas, pero yo con seis, por haber sido internacional y haber ganado campeonatos de España, sí que puedo», explica. En abril tendrá que examinarse en una eliminatoria que le situaría en la pelea por el cinturón nacional de peso pluma, que ostenta Kevin Baldospino. «Ya le he ‘dado’ en amateur y tengo unas ganas terribles de pegarme con él», reconoce Jiménez.

Conquistar España para luego conquistar el mundo. Esa es la hoja de ruta del peleador vallisoletano, al que su ranking de victorias le han aupado con sólo cinco combates hasta el puesto 230 del mundo. «Los que están por arriba y por abajo tienen más de 15 peleas y el que va a hacer el Campeonato de la Unión Europea está el 430», explica Salvi. Datos que dan un plus de valor a su proyección.

El vallisoletano hoy triunfa en profesional, un escenario que hasta hace poco no pensaba pisar hasta después de Tokio 2020. Los Juegos Olímpicos son un sueño roto por los cambios de pesos en la competición. «Se me queda esa espina clavada, porque me he preparado para ello y que te quiten el peso un año y medio antes es un golpe», reconoce el púgil, que añade una promesa: «En vez de ser campeones del mundo amateur tendremos que ser de profesionales», bromea.