Quique, operación retorno
El delantero vallisoletano del Deportivo interesa tras el fracasado ascenso de su equipo / Los coruñeses están obligados a deshacerse de fichas elevadas y pueden facilitar su traspaso
El mdelantero Quique González ve cómo le es arrebatado el balón, durante el Mallorca-Deportivo disputado el sábado.-LALIGA
La delantera es la gran preocupación del Real Valladolid. Una zona en la que cuenta con Guardiola y Plaza, espera un fichaje estrella... y otro para completar esa media ideal de dos jugadores por puesto.
Ese cuarto hombre se escribe aún rodeado de signos de interrogación. Ünal se aleja. El Villarreal aventa que no fichará delanteros este verano y cuenta con él. El Huesca pide 6 millones por Enric Gallego, una cantidad desorbitada para un jugador de 32 años que se ha pasado casi toda la vida fuera del fútbol profesional.
Aunque los aragoneses aflojen en su exigencia económica con el tiempo, el Real Valladolid está obligado a investigar otros caladeros. Y uno le ofrece pesca después de la última promoción de ascenso. La eliminación del Deportivo en el cruce definitivo ha dejado a media plantilla blanquiazul tiritando, a causa de unas fichas demasiado elevadas para Segunda.
La ayuda por el descenso sufre un bajón importante en el segundo año. Los 15 millones de la 18-19 son historia y los coruñeses deben desprenderse de jugadores cuyas condiciones económicas ya no son asumibles en su nuevo panorama presupuestario.
Uno de estos jugadores que saldrá al escaparate es Quique González. El delantero centro del Deportivo interesa al Real Valladolid para efectuar una operación retorno que a priori interesa a todas las partes.
El club pucelano conoce mejor que nadie a Quique. Parió futbolísticamente a este vallisoletano y canterano blanquivioleta que debió salir para triunfar. Tras una cesión en el Logroñés, recaló en Guadalajara, Almería, Racing y Osasuna, antes de ser fichado por los gallegos a los navarros el pasado verano, por 1,7 millones.
Quique ha sido fijo en las alineaciones, marcando 17 goles, incluido el del partido de ida de la final de la promoción. En La Coruña lo consideran importante pero no un puntal del equipo, a causa de sus altibajos. Desde marzo sólo anotó 6 goles. En sentido contrario, se destaca su enorme y constante capacidad de lucha.
El Deportivo aún se recupera del golpe de Palma y ahora está centrado en decidir si Martí continúa como entrenador. Pero es muy consciente de que debe aligerar fichas y Quique está en el mercado por mucho menos de los 10 millones que son cláusula de rescisión habitual en la plantilla coruñesa. La negociación quizá no sea corta, pero con doblar los 1,7 millones que costó el jugador hace solo un año, el club gallego podría darse por satisfecho.
El futbolista lógicamente no se ha pronunciado, pero el triple caramelo de jugar en Primera, volver a casa y ver aumentada su ficha parece suficiente como para aceptar una operación aún en pañales.