'Waldonicius'

Una vez que se ha confirmado que la lesión de Pablo Hervías es grave y que deberá estar al menos cinco meses de baja, el Real Valladolid tendrá que enviar el informe correspondiente a la comisión médica de la Liga para que le autoricen a incorporar otro jugador en su lugar. Sin embargo, no es cosa fácil. Para empezar porque existen dudas médicas respecto a que esta lesión tenga un plazo de recuperación tan dilatado, ya que diferentes expertos consultados nos hablan de un máximo de cuatro meses.

Así pues, aún no conocemos si el Pucela podrá acudir al mercado activo de fichajes, activo quiere decir para incorporar a algún jugador con contrato en vigor, bien de otro club o del propio filial no sub-23 como es el caso de Waldo.

Obviamente sí podría incorporar a un jugador que esté en el paro actualmente, un futbolista que no tenga ficha, para ser más exacto.

Aún estamos en ese proceso y, sin embargo, los hay que piden con insistencia la incorporación de Waldo Rubio, el extremo del Valladolid B al que muy probablemente no hayan visto jugar nunca. Cuando las cosas van mal para el primer equipo, aquí siempre se pide paso para la cantera. No voy a ser yo quien diga si el futbolista pacense puede o debe dar el salto al primer equipo o no, eso le corresponde a la dirección deportiva el club pero lo que sí tengo claro es que, en ningún caso, debemos lastrar su incorporación cargándole en la mochila las piedras de una responsabilidad que no es suya. No convirtamos a Waldo en una especie de Vinicius blanquivioleta, el chico tiene condiciones para aportar su rendimiento en beneficio del equipo pero aún está en proceso de formación así que, calma. Hasta el momento le hemos visto velocidad y desborde en banda, incluso ha marcado algunos goles importantes para el B pero debe mejorar en la toma de decisión final; cuando llega al borde del área, decidir cuándo centrar, en qué momento hay que disparar o cuándo jugarse el uno contra uno no es fácil, requiere aplomo, experiencia, confianza y seguridad; como decía un conocido anuncio de neumáticos, la potencia sin control no sirve de nada.

Waldo es un jugdor que reúne condiciones muy favorables pero necesita adquirir otras cuya mejora se trabaja en los entrenamientos. A mí me parece un buen futbolista con un futuro muy interesante pero empujarle a avanzar saltándose los pasos necesarios solo le perjudicaría. Paciencia. Más aún cuando, insisto, no sabemos si la liga autorizará o no a inscribir un nuevo jugador para sustituir la baja de Pablo Hervías, que llegó con muchas ganas pero no ha podido demostrarlas. Una baja, por cierto, a la que ha rodeado un cierto aire de misterio que no ha contribuido a aclarar el comunicado publicado por el Real Valladolid y por el Eibar, que es el mismo, palabra por palabra.

Hemos tardado en conocer el origen de la lesión del jugador y su proceso pero, más aún, el comunicado se refiere a que el jugador fue tratado por el servicio médico del club, sin aclarar cuál de los dos, tras el partido con el Villarreal el 8 de marzo, a raíz del cual comenzó a sentir molestias. Lo único que sabemos es que el comunicado lo firma, solo en la página web del Eibar, IMQ, la aseguradora médica del conjunto vasco. Demasiado lío, a mi entender.