PHotoEspaña reformula la idea del paisaje en su regreso a Valladolid
El Festival Internacional de Fotografía inaugura en San Benito, Las Francesas y Campo Grande tres exposiciones de Juan Millás, Cristina Garrido y Cristóbal Ascencio
Valladolid vuelve a ser, desde esta mañana, una de las sedes del Festival Internacional de Fotografía PHotoEspaña, que alcanza este año su vigesimosexta edición bajo el lema Perpetuum mobile (Movimiento perpetuo), con la intención de reivindicar la «naturaleza dinámica, fluida y en constante transformación» del medio; con la intención de plantearse «qué puede llegar a ser la fotografía». Y, para ello, PHotoEspaña vuelve a las paredes de dos salas municipales como San Benito y Las Francesas, así como al Campo Grande, espacios que acogen las exposiciones de Juan Millás (Madrid, 1975), El bosque en los ojos; Cristina Garrido (Madrid, 1986), El color local es un invento extranjero; y Cristóbal Ascencio (Guadalajara, México, 1988), Las flores mueren dos veces. Todas ellas, propuestas que reformulan la idea del paisaje, permanecerán en Valladolid hasta el próximo 7 de julio.
El tapatío despliega sobre las verjas de acceso al Campo Grande su propio jardín. Sobre fondos negros, Ascencio compone imágenes un tanto oníricas, que parecen surgir de la nada, como recuerdos de una noche oscura. Es, como advierten desde PHotoEspaña, una forma de recordar al padre ausente, al hombre que se quitó la vida, para conectar con él a través de las últimas plantas que cuidó. «Es un paisaje emocional, personal, un jardín que tiene mucho de sanador, entre lo real y lo imaginado», advirtió durante la inauguración la directora de PHotoEspaña María Santoyo.
No lejos de allí, en Las Francesas, Garrido invoca a Jorge Luis Borges, quien dejó escrito: ‘El color local es un invento extranjero (surge de que otros nos miren, no de que nosotros seamos)’. La artista madrileña compone su propia Escala Pantone, acude a las páginas webs de distintas pinacotecas para crear una retícula a partir de fragmentos de cielos pintados por diferentes artistas, en distintos tiempos, en lugares variados.
Así, es ella misma quien crea su propio firmamento a partir de las pinceladas que un día pudieron dar Sisley en Port-Marly o Manet en Argenteuil, rincones de la región de Ile-de-France que también pintó Pisarro en la segunda mitad del siglo XIX. La identidad colectiva viene a decir, los elementos que la definen, no deja de ser un artificio, una construcción que depende de miradas subjetivas en muchas ocasiones.
Y conecta su trabajo con algunos paisajes surgidos de los fondos del Museo del Romanticismo, con obras de Carlos de Haes, Francisco Lameyer, Genaro Pérez Villaamil o Blanchard que se asomaron y retrataron realidades que les resultaban ajenas o, incluso, que nunca llegaron a conocer.
Finalmente, en San Benito, Juan Millás despliega trabajos realizados desde 2017 hasta la fecha, ensayos visuales, reportajes editoriales y series autobiográficas reunidas bajo el título El bosque en los ojos. Trabajos que, de forma no premeditada, tienen en la naturaleza, en la flora y la fauna, un vínculo, un hilo invisible que atraviesa cada propuesta del artista que, por ejemplo, en la pandemia se dedicó a superponer imágenes que había captado en el entorno natural con otras que capturaba en su ámbito familiar y doméstico. Si no podía salir al bosque, explica, lo recrearía ante sus ojos.
En San Benito hay obras que han surgido del contacto con los paisajes familiares de Asturias. Hay otros, sin embargo, que se inspiran en lecturas como Biofilia. El amor a la naturaleza o aquello que nos hace humanos, de Edward O. Wilson, que explican la necesidad del ser humano de conectar con otras formas de vida, con volver a una parte de nuestra naturaleza que se fue perdiendo a medida que el ser humano fue evolucionando.
Con la inauguración hoy de las tres exposiciones, y fuera ya de Madrid, Valladolid se convierte en la primera de las sedes de PHotoEspaña en poner en marcha la programación de esta 26 edición, que desplegará en próximas fechas propuestas en Almería, Barcelona, Santander, Cartagena, Segovia, Zaragoza o Ciudad de México.