Diario de Valladolid

Juárez y Oramas, voces para una ‘naturaleza expresiva’

Oscuras o coloridas, inquietantes y sugerentes, ambos reúnen obras marcadas por la abstracción

La galerista Marisol Puertas contempla una de las obras de Enrique Oramas.-E.M.

La galerista Marisol Puertas contempla una de las obras de Enrique Oramas.-E.M.

Publicado por
Julio Tovar
Valladolid

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La artista vallisoletana Laura Juárez vuelve a la Galería Lorenzo Colomo, tras muestras como Entre lo concreto y lo abstracto e Impulsos. Y regresa junto al artista santacrucero Enrique Oramas, con la muestra Origen. Naturaleza expresiva, que permanecerá en el espacio de la calle Macías Picavea hasta el próximo 16 de marzo.

Un enunciado que entronca con aquella reflexión de Antonio Gamoneda en torno a la obra de Díaz-Caneja –‘Ya no hay lugar para preguntarse si las figuraciones son o no son, si nos entendemos con objetos o paisajes, si es tierra o atmósfera, si lo uno es lo otro o al contrario’–, puesto que en sus manos aparecen fusionados paisaje y alma, entrelazados, interviniendo el uno sobre la forma del otro.

Juárez despliega en la galería una colección de coloridas abstracciones en pequeño formato. Acrílicos en los que las manchas de color, que se superponen como tratando de imponerse las unas sobre las otras, parecen cobrar movimiento en la centralidad de la blanca superficie, buscando traspasar los límites, los márgenes. A veces, los tonos oscuros se erigen dominantes sobre unos amarillos luminosos; en otras ocasiones, son unos intensos azules los que pugnan ante unas sombras que buscan ampliar sus dominios. Son, en palabras de María Juárez, «automatismos abstractos que gritan en el lienzo», «que muestran la superficie de su alma, el impulso de unas emociones que tienen una raíz más profunda, fruto de una reflexión callada».

Oramas, por su parte, presenta un trabajo oscuro como la piedra volcánica, geométrico, de estratos –como sus pequeñas esculturas, Aliento geográfico, realizadas con lamas de papel encolado–, poroso, anguloso, realizado en grafito y carbón, que ya pudo verse en parte en el Palacio de Pimentel el pasado año: ahí están propuestas como De una tarde sin afán o algunas obras de la serie Paisajes desactivados. Son los suyos parajes inquietantes y evocadores, llenos de contrastes y de tensión, que se recortan sobre la blanca y luminosa superficie.

Se da la circunstancia de que Juárez y Oramas inauguraron, el pasado 8 de febrero, el espacio expositivo PerForo (calle Cardenal Torquemada, 45) con la exposición Sabandijas, de Elisa Rodríguez.

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