«El escritor vive para que sus personajes existan»
Andrés Neuman presenta ‘Fractura’, libro surgido con el accidente de Fukushima y culminado tras seis años y medio de trabajo
El escritor Andrés Neuman, ayer en la Feria del Libro de Valladolid.-F.L.V
El escritor hispano argentino Andrés Neuman, nacido en Buenos Aires (1977) y emigrado a España siendo adolescente, presentó ayer en la Feria del Libro su última obra de ficción publicada en febrero de este año, Fractura (Alfaguara), que se fraguó a raíz del accidente atómico de Fukushima (Japón) en marzo de 2011 y que concluyó tras seis años y medio de trabajo. «La novela habla sobre todo de supervivientes y la vida enseña el oficio de sobrevivir», explicó.
La novela la protagoniza el personaje de ficción Watanabe, un superviviente de otro accidente, el de Hiroshima, a través de «cuatro historias de amor que el protagonista tiene con cuatro mujeres de países, idiomas y vidas distintas», expone en declaraciones recogidas por Ical. El autor estaba en París cuando se produjo la explosión de la central nuclear de Fukushima en marzo de 2011. «Contemplé la nube como una realidad atroz en un suceso japonés visto en Francia, la segunda potencia atómica occidental, por parte de alguien educado en Argentina y que siente el duelo cada 11-M de todo el país por el atentado terrorista de Madrid. ¿Dónde estoy viendo estoy cuántas veces sucede?», apunta que se preguntó antes dar forma al libro.
Neuman se planteó su trabajo literario en base a los «supervivientes insólitos» de la historia contemporánea y se hizo otras preguntas: «¿Se puede algo lejos de algo? ¿Cuántas maneras tenemos las personas de sentir muy cercano lo que sentimos lejano?».
Así se desarrolló Fractura y, en base a la ficción, el escritor entiende que se puede experimentar «si somos un conjunto de otros u otras más o menos silenciados por las circunstancias» y destacó que el hecho de escribir en primera persona a través de las cuatro mujeres que tienen una historia de amor con el protagonista le permite «poder hablar con perspectiva de género».
En torno a la memoria, las cicatrices y las heridas individuales y colectivas que deja un suceso trágico, Andrés Neuman entiende que surge la pregunta sobre qué es una víctima pero dice que «lo interesante es escucharla, ver qué fases atraviesa, si tiene un trauma o lo ha superado», al tiempo que considera que a las víctimas «a veces se las silencia como muebles antiguos incómodos cubiertos con una sábana». «Hay que tratar de pensar quién es víctima y quién no lo es», agregó.
Sobre el manejo de la ficción en sus obras, el autor hispano argentino afirma que «se entrena» al igual que lo hacen los actores «que adquieren múltiples saberes para alimentar a su personaje» y expone que en el caso del escritor «vive para que sus personajes existan» y, por ello, acumula experiencias que «trascienden a la realidad».
«Nunca sabemos quiénes somos y por eso debemos escribir», concluye.