Castilla y León es la región donde más sube la espera para ser atendido por un especialista
Los castellanos y leoneses aguardan 114 días para una consulta externa frente a los 76 de media en España / La demora para ser intervenido en la Comunidad se eleva hasta los 152 días, lo que la coloca como las sexta más elevada del país
La pandemia ha sacudido el sistema sanitario desde múltiples ángulos y, poniendo el foco en la espera para ser atendido en una consulta externa, Castilla y León destaca por ser la comunidad donde más se ha incrementado el tiempo hasta recibir cita con el especialista. En concreto, los ciudadanos aguardan un 72,73% más que antes del estallido del Covid. Si a fecha de 2019, pasaban 66 días, un año después la cifra llegaba hasta los 114.
A esa escalada relativa, la mayor de las que se observan en toda España, le sigue la experimentada en la Comunidad Valenciana, donde el crecimiento se constata en un aumento del 70,18%. Por detrás, a mayor distancia, se encuentran Extremadura (59,49%), Cataluña (50,5%), Aragón (47%), Navarra (43,59%), Castilla La- Mancha (21,43%), Baleares (20,51%), Murcia (18,03%), Galicia (16,67%) y Canarias (9,84%).
Pero, en ese listado, están los casos particulares de País Vasco y de Madrid, que en diciembre de 2020 habían logrado prácticamente volver a los índices de espera anteriores a la pandemia y, sobre todo, que hay seis comunidades –o ciudades autónomas– en las que el tiempo para ser atendido en una consulta externa es más bajo que en 2019.
Los residentes de Cantabria, Andalucía, La Rioja, Melilla, Asturias y Ceuta aguardan menos, mientras en Castilla y León, lejos de recuperar ritmo, hay que hacer más cola. Los pacientes tardan 48 días más que antes en acudir, por ejemplo, a la consulta del oftalmólogo, el traumatólogo, el ginecólogo o el dermatólogo.
Esto supone que si antes de la pandemia la realidad en Castilla y León estaba equiparada a la media nacional, con 66 días frente a los 65,36 del país, ahora esos 114 días se alejan de los 76,52 de referencia en el conjunto del país, según se desprende del análisis de un estudio publicado ayer por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) –con datos del Ministerio de Sanidad–, en el que concluyen que la situación «es ahora claramente peor».
Eso sí, aunque Castilla y León sea la comunidad con mayor incremento relativo a la hora de acudir al especialista, sus ciudadanos no son los que más esperan hasta llamar a la puerta de la consulta externa. Por encima están Cataluña (152 días de espera), Aragón (147), Canarias (134), y Extremadura (126). Además, le siguen muy de cerca Andalucía y Navarra (112 en ambos casos).
Más allá de la atención es Atención Especializada, el impacto de la pandemia en el sistema sanitario se ha notado también en la lista de espera quirúrgica y, en el caso concreto de Castilla y León, se convierte en la comunidad con el tercer mayor crecimiento porcentual al comparar las cifras del segundo semestre de 2020 con el mismo periodo del año anterior, cuando no se había desatado la pandemia.
En concreto los pacientes tuvieron que aguardar un 61% más de tiempo para que les practicasen una operación, sólo por detrás de Castilla La-Mancha, donde el incremento fue del 75,46%, y de Baleares, con una subida del 70,89%.
En términos absolutos, supone que si en Castilla y León antes se esperaban 94 días para entrar en quirófano, ahora son 152, lo que la convierte en la sexta autonomía con mayor espera. Más de cinco meses, en concreto. Desde este punto de vista, el listado lo encabeza también Castilla La-Mancha (286 jornadas), seguido de Andalucía (188), Aragón (180), Extremadura (175) y Cataluña (155).
Los únicos que no tardan ni dos meses en ponerse la bata para someterse a una intervención son los ciudadanos de Melilla, Asturias y País Vasco. En el caso del Principado destaca, además, que son los únicos que al finalizar 2020 tenían tiempos de espera más reducidos para entrar a quirófano que un año antes. De los 83 pasaron a los 60.
El resto de territorios no consiguieron ponerse con signo negativo y, de media, en España se aumentaron en un 34% los tiempos de espera para someterse a una cirugía debido a la pandemia. De las 94 jornadas se ha pasado a las 126, tal y como se desprende de las tablas colgadas por la OCU.
Entre las conclusiones de esta organización sin ánimo de lucro, divulgadas después de analizar los datos que el Ministerio de Sanidad publica en su página web de forma semestral, destaca que, a pesar de que los sistemas autonómicos no han conseguido recuperar los datos previos al Covid, al menos sí hay visos de mejora.
«Lo últimos datos, correspondientes al segundo semestre del 2020, reflejan una mejora con respecto a los datos del primer semestre del 2020, cuando nos vimos afectados de lleno por la llegada de la pandemia, pero todos los indicadores siguen siendo más elevados que en diciembre de 2019, antes de la irrupción de la Covid-19», resumen.
Como ejemplo, destacan que en diciembre del año pasado «un 26,9% de los pacientes en espera por una intervención llevaban más de seis meses esperando», mientras en el semestre anterior ese índice llegó al 34%.
Según los últimos datos albergados en la web del Ministerio, al cierre de 2020 había 30.322 personas pendientes de una operación en Castilla y León. La mayoría, con 9.842 casos (32,5%), correspondientes con la especialidad de traumatología, seguido de las 5.760 (19%) de cirugía general y digestivo, y de las 4.940 (16%) de oftalmología.
La especialidad médica con más días de espera para entrar en quirófano en la comunidad es cirugía plástica, con 214 días, y la que acumula un mayor porcentaje de pacientes con más de seis meses de retraso es traumatología, donde el 45% de los castellanos y leoneses que componen la lista, llevan más de medio año apuntados.