Tejerina: «Se instalarían aquí más parques sin la barrera de la ecotasa»

El resultado final de cómo quedará al final el mapa del viento en España, ni en Castilla y León, no lo conoce ni los promotores, ni la administración. Aún así, el secretario general de la Asociación Empresarial Eólica de Castilla y León (Apecyl), Eugenio Tejerina, si se atreve a aventurar que Castilla y León mejorará aún su posición en el mercado eólico, que ahora ya lidera, tanto en potencia instaladad, con 5.679 megavatios, como en generació eólica, con 10.940.

Y lo hará porque, como asegura, la Comunidad tienen bases firmes. No sólo tiene un territorio extenso y «un sector que funciona», sino una infraestructura eléctrica avanzada con capacidad de evacuación a la red, fruto del trabajo de planificación anticipada entre la Junta de Castilla y León, Red Eléctrica Española y los propios promotores.

Además, cuenta a su favor con un régimen de autorización administrativa «más avanzada» que en otros rincones de la geografía española. «Y eso no se improvisa de un día para otro», apostilla Tejerina, quien añade, a modo de ejemplo, que los parques que se están tramitando ahora dieron sus pasos burocráticos ya hace unos cuantos más.

Ese trabajo previo es, a su juicio, el aval necesario para que Castilla y León esté en condiciones de albergar más proyectos de estas características.

La ecotasa

Un único pero pone a esa expansión: la ecotasa que la Junta de Castilla y León impuso a las renovables y que, en su opinión, puede hacer a algunas empresas desistir de elegir la Comunidad como destino de sus proyectos eólicos. «Que la fiscalidad regional no sea un obstáculo», añade, al mismo tiempo que se pregunta por qué una ecostasa por cuestiones medioambientales a la energía eólica o a la hidráulica, que no emite CO2 y no se exija, por ejemplo, al carbón o a la nuclear, que son contaminantes.

Por ello, insiste en la necesidad de que la Junta rectifique y elimine ese tributo, como han realizado el resto de autonomías, salvo Galicia, o que, al menos, «modere» esa ecotasa, hasta el punto de que realmente «resulte atrayente».

Tejerina, desde la asociación, reclama a la Junta «altura de miras» y que ponga en una balanza los ingresos que le genera la recaudación de esa tasa, y todos los beneficios económicos directos e indirectos –se estima que por cada mil megavatios se genera una inversión de mil millones de euros–, al mismo tiempo que puestos de trabajo. «Que no haga castillos en el aire», apostilla.

Sea con ecotasa, o sin ella, el máximo responsable de los promotores castellanos y leoneses, defiende que «Castilla y León tiene buenas posibilidades» de incrementar la potencia eólica hasta 2030.