Villarrubia: «¿A qué militancia apelan; a la de Galicia, Palencia, Madrid?

Castilla y León está en boca de todos en el PSOE y es el espejo en el que se miran los críticos al todavía secretario federal, Pedro Sánchez, para dejarle claro que ya no es el máximo responsable del partido, tras la dimisión de los diecisiete miembros de su ejecutiva, y que no le queda otra que irse.

Justo lo que hizo el entonces secretario general del PSOE castellano y leonés, Julio Villarrubia, cuando el 30 de mayo de 2014 una maniobra urdida por Óscar López, curiosamente hoy uno de los hombres fuertes de Sánchez, le descabalgó de la dirección castellano y leonesa.

En ese momento lo que hizo la dirección federal de Alfredo Pérez Rubalcaba, de la que López era su secretario de organización, fue interpretar ese artículo ‘36.o’, al que ahora se aferra Sánchez, para indicar que con la dimisión de la mitad más uno de la ejecutiva al resto, con Villarrubia a la cabeza, no le quedaba otro camino que dimitir.

«¿A qué militancia apelan?», se pregunta ahora Julio Villarrubia en declaraciones a EL MUNDO DE CASTILLA Y LEÓN. Y continúa: «¿A la de Galicia, la de Madrid o a la de Palencia, que yo sufrí?», en clara alusión a la designación ‘a dedo’ del candidado a las elecciones gallegas; el quitarle a él de en medio para colocar a Luz Martínez Seijo en la lista al Congreso; y la expulsión del madrileño Tomás Gómez.

«¿Dónde está ahí el respeto a la militancia?», insiste el que fuera máximo responsable de los socialistas castellanos y leoneses, hasta que la maniobra de López se lo llevó por delante.

Villarrubia no entiende cómo el secretario de organización, César Luena, se atreve a decir que «algunos y algunas» dirigentes del PSOE «han querido torcer la voluntad de los órganos legítimos respaldados por sus militantes y han instigado estas divisiones para provocar que no se celebrara un congreso, que el PSOE lo dirigiera una gestora, sin contar con qué apoyos o alianzas fuera del partido».

Asegura el también ex diputado palentino que no quiere entrar a valorar esas afirmaciones, porque lo que desea es «recuperar la esperanza, con el PSOE de siempre para dejar de ir de desastre en desastre».

Villarrubia, eso sí, deja claro que su caso no es igual al de Sánchez. «A mí no me echaron los míos, a mí me dimitieron aquellos que tuve que aceptar cuando llegué. A Sánchez, en cambio, le dimiten los suyos, a quienes él designó para su ejecutiva», aclara el político palentino, quien recuerda Sánchez que no le queda más camino que dimitir; «como lo hice yo», puntualiza.

Nada de lo que convoquen los que quedan de la ejecutiva, como la reunión de hoy y el comité federal para un nuevo congreso, es válido. «Como tampoco lo fue el comité autonómico que yo intenté convocar y, por cierto, no me dejó quien todos sabemos», indica en una clara alusión a López, aunque sin citarlo. Ni Sánchez, ni Luena son nadie para hacer ya nada, según Villlarubia, porque ahora quien manda es el comité ejecutivo federal, no la ejecutiva, «que no existe».

Villarrubia, eso sí, quiere dejar claro que nadie de los críticos va a dejar fuera a la militancia: «Claro que se va a dar voz a la militancia, y habrá un congreso, pero con tranquilidad y con una militancia no manipulada».

Suspendida la reunión en Valladolid

Ya no hay motivo. Lo que ya no se va a celebrar es la reunión que los críticos a Pedro Sánchez tenían previsto para hoy en el restaurante El Paso de Laguna de Duero (Valladolid), tal y como adelantó este periódico. Entienden que la situación es otra ya y no existe ahora motivo para realizarla. Además, creen que alguno podría verla como que está