CCOO asume que "todos los que estuvieron” en los órganos de las cajas tienen “algún tipo de responsabilidad" en su desaparición
Hernández entiende que es difícil explicar a los que toman las decisiones en Madrid, Málaga o Barcelona que no deben cerrar oficinas en cabeceras de comarca
El secretario general de CCOO en Castilla y León, Ángel Hernández, señaló hoy que “algún tipo de responsabilidad tienen todos los que estuvieron” en los órganos de dirección de las cajas de ahorro desde que se inició la reestructuración financiera, incluidas los sindicatos, “conscientes” en aquel momento de que ese proceso conllevaría “reconversiones, con cierres de oficinas”. “Estábamos los que estábamos cuando eran cajas. Ahora son bancos y están fuera de la tutela regional”, espetó.
En este sentido, entendió la dificultad que existe ahora para explicar a los que toman las decisiones en Madrid, Málaga o Barcelona que no deben cerrar oficinas en cabeceras de comarca de Castilla y León. “Le vamos a explicar nosotros al presidente de Unicaja la realidad de nuestra tierra, con muchos pueblos pequeños, muy diferente a la de Andalucía. Y le vamos a convencer que hay que mantener abiertas oficinas… y nos dirá que vale, que hablemos con el Gobierno de Castilla y León”, ironizó.
En relación al proceso de reestructuración que se lleva a cabo en la actualidad y que puede concluir en despidos, Hernández consideró que la gran diferencia es que en Europa existen pocas oficinas financieras con “muchos trabajadores”, mientras que en España “hay pocos trabajadores para muchas oficinas”. En este sentido, se comprometió a “intentar” que la salida de empleados de la banca sea la mínima posible en aquellas entidades en las que se está negociando, como por ejemplo en Banco Ceiss.
Igualmente, matizó que son dos procesos los que se desarrollan. Por un lado, la reestructuración de las antiguas cajas de ahorro y, por otro, la banca tradicional “reduce costes” e impone un nuevo modelo de atención al cliente, de forma más informatizada y que permite restar empleos.
Por último y para vincular estos datos con los conocidos ayer de la Encuesta de Población Activa (EPA) para Castilla y León, Hernández señaló que en estas cifras de 8.100 parados más en el primer trimestre “figuran los parados que no salen en ningún sitio, frutos del goteo del tejido productivo, las pequeñas empresas”, y advirtió de que será mayor cuando se sumen las distintas deslocalizaciones, como Lauki o Dulciora o los propios empleados de la banca.