De Diego destaca que la Junta ha mantenido los fondos para ayuda al desarrollo a pesar de la crisis

La directora de Relaciones Institucionales y Acción Exterior de la Junta, María de Diego, destacó que a pesar de la crisis los fondos del Gobierno Regional destinados a la ayuda al desarrollo se han mantenido a pesar de la crisis, a la vez que subrayó que además de la acción directa en proyectos concretos, la lucha contra la pobreza pasa por la educación y la concienciación.

Antes de participar en la jornada 'Agua, género y desarrollo', De Diego, aseguró que el compromiso de la Junta en la lucha contra la pobreza se ha mantenido en “esta situación tan difícil”, e incluso se han puesto en marcha nuevas iniciativas dirigidas a sensibilizar y concienciar a la población y más programas de cooperación.

Así, la directora de Relaciones Institucionales argumentó que para la Junta es tan importante las intervenciones en países empobrecidos, a través de la convocatoria de proyectos que llevan a cabo las oenegés, como la labor de educación para el desarrollo. “Hasta que no logremos una sociedad crítica y comprometida el objetivo final de acabar con la pobreza no lo lograremos”, sentenció.

En este sentido, explicó que se trabaja con centros educativos, se mantiene el programa de 'Jóvenes Solidarios' y hace dos años se puso en marcha el programa de voluntariado para funcionarios.

De Diego también indicó que con motivo del Día Mundial del Agua, que se conmemora el próximo día 22 de marzo, se han organizado a lo largo de esta semana diversos actos para concienciar e informar de la realidad en la que viven los casi 900 millones de personas que no tienen acceso al agua potable y los problemas que genera el no tener cubierta esta necesidad básica.

En este sentido, indicó que esta situación condiciona la vida desde aspectos como la alimentación y la salud y también con la igualdad de género, “ya que en la mayor parte de los casos son las mujeres y las niñas que las que tienen que cargar con la responsabilidad de llevar agua al hogar”.

Proyectos de agua

Así, en los últimos cuatro años, el Gobierno autonómico ha apoyado 17 proyectos de agua en países empobrecidos que han permitido la construcción de 16 pozos y 30 sistemas de agua y canalizaciones -el 30% de los proyectos, en África- con una inversión de 2,6 millones euros. La Ayuda Oficial al Desarrollo destinada a este tipo de intervenciones ha pasado de representar el 8,7% de su total en 2011 al 20% en 2014. Para María de Diego, “la prioridad de nuestra cooperación se está enfocando en los sectores de mayor necesidad para la población de los países más empobrecidos, aspecto que está permitiendo mejorar el impacto de nuestra ayuda y mejorar, en mayor medida, las condiciones de vida de sus ciudadanos”.

En este sentido, según los datos que ofrece la OMS, las enfermedades diarreicas son la segunda mayor causa de muerte de niños menores de cinco años y ocasionan la muerte de 760.000 niños cada año, convirtiéndose así en la quinta causa de mortalidad mundial, por encima del SIDA o la malaria. De ahí que el compromiso de la Junta en esta materia sea luchar contra esta situación y sus causas mediante acciones específicas que garanticen el acceso al agua como un derecho humano. “Garantizar dicho acceso es una de las máximas prioridades ya que el agua contribuye a mejorar el bienestar social de la población y el crecimiento inclusivo, aspectos que afectan directamente a los medios de subsistencia de miles de millones de personas”, señaló De Diego.

La Jornada ‘Agua, género y desarrollo’, organizada por Ongawa y la Fundación Musol sirvió para conocer en detalle sus iniciativas. Ongawa trabaja por aliviar la situación de extrema pobreza en la que se encuentran las comunidades de Bombo, Mjema, Mvaa y Mvango, todas ellas en Tanzania; la Fundación Musol -entidad creada por un grupo de funcionarios- trabaja actualmente en las áreas rurales de Villa Tunari, en Cochabamba (Bolivia), lugar que presenta los índices de prevalencia de enfermedades de transmisión hídrica más altos del país motivados por las condiciones de acceso del agua y perjudicando principalmente a la población infantil.