Sólo una de las 17 entidades locales menores se disolverá por no rendir sus cuentas

Sólo una de las 17 entidades locales menores de Segovia, Valdesimonte, se disolverá finalmente por no rendir sus cuentas antes del 31 de diciembre de 2014, tal y como establece la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, aprobada hace un año. Deberá integrarse en el municipio de Cantalejo como un barrio más casi 35 años después, algo que, por otra parte, ya se daba por hecho hace meses.

Al término del pasado octubre eran todavía once las entidades segovianas de ámbito territorial inferior al municipio (eatim) que no habían registrado sus balances de 2011, 2012 o 2013 en el Consejo de Cuentas de Castilla y León. Aun así, fuentes de la Diputación avanzaron entonces a la agencia Ical que se esperaba que llegaran a tiempo todas menos Valdesimonte y, finalmente, se han cumplido las previsiones.

Arroyo de Cuéllar (perteneciente a Cuéllar) presentó sus cuentas el pasado 18 de diciembre, y el 17 hicieron lo propio Campo de Cuéllar y Chatún (del mismo municipio). Revenga (Segovia) cumplió el 13 y Carbonero de Ahusín (Armuña), que tenía que rendir todavía por dos ejercicios (2013 y 2012), un día antes.

Y la lista continúa hasta sumar una intensa ronda de diez presentaciones ante el órgano autonómico de control externo en apenas un mes. Cierto es que algunas de ellas ya llegaron a otoño con sus presupuestos y liquidaciones de 2006 a 2013 aprobados, pero tenían los expedientes de cuentas anuales “en trámites”.

A Jemenuño, Paradinas, Tabladillo y Villoslada (las cuatro dependientes del municipio de Santa María la Real de Nieva) sólo les faltaba rendir 2013. Y Losana de Pirón (Torreiglesias) se había demorado también por “algunos problemas informáticos”, aunque ya los solventó hace semanas.

Las primeras en cumplir

En el otro extremo se encuentran las seis eatim que cumplieron con muchos meses de antelación. En concreto, se trata de Lovingos (dependiente de Cuéllar), Bernuy de Coca (Santiuste de San Juan Bautista), Cobos de Segovia (Sangarcía), Montuenga (Codorniz), Moraleja de Coca (Nava de la Asunción) y Vivar de Fuentidueña (Laguna de Contreras), tal y como precisaron las mismas fuentes de la Diputación segoviana, que las ha ayudado a asegurar la tramitación.

No en vano, el porcentaje de rendición de las eatim de la Comunidad se quedó el año pasado en un 49,4%, por lo que un resultado semejante en este ejercicio habría supuesto la disolución de la mitad de ellas si se aplica con rigor la reforma local. De ahí que el presidente del Consejo de Cuentas de Castilla y León, Jesús Encabo, valorase en el arranque del último cuatrimestre el papel “fundamental” que estaban desarrollando las diputaciones, sobre todo, para compensar la falta de secretarios e interventores de esas entidades.

Encabo ya se mostraba entonces optimista por la mejoría del ritmo de rendición de cuentas con respecto al de 2013, a pesar de que en Segovia fuera del 35% a dos meses vista. Y en cuanto a Valdesimonte, que al término de 2013 tenía 54 habitantes censados, desaparecerá como entidad local menor después de ostentar esa condición desde 1980; en los diez años anteriores ya fue barrio de Cantalejo y antes, hasta 1970, municipio independiente.

La reforma local

La Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, aprobada por el Gobierno a finales de 2013, señala en referencia a las eatim que “la no presentación de las cuentas ante los organismos correspondientes del Estado y de la Comunidad Autónoma respectiva será causa de disolución”. De esta forma, “el personal que estuviera al servicio de la entidad disuelta quedará incorporado en el Ayuntamiento en cuyo ámbito territorial esté integrada”, mientras que el Ayuntamiento de la propia entidad “quedará subrogado en todos sus derechos y obligaciones”, perdiendo así la capacidad de autogobierno.

Las eatim son unidades administrativas con carácter intramunicipal, con competencias en administración y conservación de patrimonio, así como en vigilancia, conservación o limpieza de vías urbanas, caminos rurales, fuentes, lavaderos y abrevaderos. También pueden ejecutar las obras y prestar los servicios que les delegue expresamente el Consistorio del municipio del que dependan.

En Castilla y León hay 2.224 entidades de este tipo y, con fecha 15 de diciembre, el 79,1% había presentado sus cuentas. Las tres provincias con más eatim, Burgos, León y Palencia, estaban al 68,7, 85,5 y 76,5% en índice de rendición, respectivamente. Y en total, 450 expuestas a su disolución a la espera del recuento de las dos últimas semanas del año.