Valladolid avanza hacia la nueva estación de tren: Adif sella el contrato para iniciar las obras en septiembre

Con la hoja de ruta marcada y sin freno. Así es como viaja, a velocidad de AVE, el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), dependiente del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible de Óscar Puente, con el proyecto de la nueva estación de tren de Campo Grande en Valladolid. Tanto que acaba de sellar el contrato de obra con la adjudicataria, la UTE formada por Ferrovial, Vías y Construcciones y la vallisoletana Zarzuela, tal y como consta en el portal de contratación, con el objetivo claro de iniciar las obras en la segunda quincena de septiembre

Rúbrica que viene a corroborar lo que ya el ministro Óscar Puente afirmaba cuando presentaba allá por el mes de febrero de este año, que el proyecto no se iba a quedar en recreaciones virtuales y que la ejecución de la nueva estación de Campo Grande de Valladolid echaba a andar para ir quemando plazos de licitación, ya superado; de adjudicación, también rebasado en tiempo y forma; y ahora la formalización del contrato con la UTE adjudicataria, algo que se hacía el pasado lunes 25 de agosto, según consta en el contrato colgado en el portal de contratación del Estado.

Contrato de «obras de ejecución del proyecto de construcción de la remodelación de la estación de Valladolid Campo Grande», que fija su coste en 215.821.141,80 euros, es decir casi 50 millones menos de lo licitado, y un plazo de ejecución hasta 2029.

Así se desprende de la anualidades que se fijan en el contrato de obras. Anualidades que recogen que ya en este 2025 se acometerán obras por un importe superior a los 7,68 millones. En 2026, la cifra se eleva a hasta los casi 60 millones, que se convierten en más de 81,1 al año siguiente. Para 2028, el desembolso para la obra de la nueva terminal de trenes de Valladolid se elevará a los 62,1 millones. Lo que es lo mismo, el grueso de la construcción de la estación se llevará a cabo entre 2026 y 2028, años en los se ejecutarán obras por valor de casi 202 millones, es decir el 93% de la ejecución.Para el último año, el 2029, en el que se fija su finalización, el desembolso será de 6,5 millones en los últimos remates.

43 meses de ejecución

El contrato fija un plazo de 43 meses para ejecutar la obra, «contados a partir del acta de comprobación de replanteo e inicio, algo que Adif tiene previsto llevar a cabo en esa segunda quincena de septiembre. La garantía del cumplimiento del contrato queda fijada en el punto octavo del mismo: «Para responder al contrato ha sido constituida a favor de Adif-Alta Velocidad una garantía definitiva por un importe de 8.918.229 euros».

La formalización y firma del contrato de obra supone el paso definitivo para que Valladolid vea entrar las máquinas en Campo Grande e inicien la construcción de una terminal que convertirá a Valladolid en un nodo ferroviario nacional con capacidad para cinco millones de pasajeros al año y hasta 17.500 viajeros en un día laborable en 2050.

El proyecto contempla la construcción de un nuevo edificio para pasajeros, la duplicación de las vías y los andenes y la transformación del entorno urbano con una nueva plaza, itinerarios para peatones y bicis y un aparcamiento subterráneo. Se apuesta, así, por una integración en superficie y por liberar espacios para la ciudad. La fachada estará envuelta por una piel textil, donde la luz será la gran protagonista, que la convertirá en un icono para la arquitectura ferroviaria y para Valladolid.