Lo que pierde Valladolid con la marcha de Ryanair: un vuelo regular a Barcelona

El anuncio de la aerolínea irlandesa Ryanair de poner fin a sus operaciones en el aeropuerto de Valladolid ha caído como un jarro de agua fría en una terminal que no atraviesa su mejor momento y que a lo largo de 2024 perdió más de un 9% de viajeros. Sin embargo, más allá de las cifras, la realidad es que la presencia de la compañía del arpa en Villanubla no es sinónimo de una amplia oferta de destinos, sino más bien lo contrario, puesto que de manera regular tan solo cuenta con una conexión, a Barcelona, la cual se viene repitiendo entre dos y tres días a la semana.

No es ninguna novedad que el aeropuerto de Valladolid, ubicado en la localidad de Villanubla, está lejos de la que hace años era una oferta relativamente amplia con vuelos a varios puntos de España y de Europa. En aquel entonces eran varias las compañías que volaban desde esta terminal, mientras que ahora estas se han reducido a la mínima expresión.

De manera regular solo opera Ryanair. Durante este mes de enero cuenta con vuelos hacia y desde Barcelona los lunes y los viernes, y desde febrero estaba previsto que estos tuvieran también lugar los domingos, aunque esta opción durará poco si la compañía cumple sus planes de 'bajar la persiana' "a final de marzo".

Por otro lado, la aerolínea irlandesa también venía ofreciendo una conexión entre Valladolid y Palma de Mallorca, aunque en este caso solo lo hacía entre marzo y octubre, coincidiendo con los meses más demandados para viajes vacacionales.

Por todo lo anterior, el verdadero golpe que sufre Valladolid por la marcha de Ryanair viene por el reciente anuncio de la compañía en el que desvelaba sus planes para establecer una base de operaciones en Villanubla y que se disipan por completo a la vista de los recientes anuncios.

Con la marcha de Ryanair, y teniendo en cuenta la oferta de vuelos actual, el aeropuerto de Villanubla únicamente contará a partir de abril con los vuelos a Las Palmas de Gran Canaria que oferte la compañía Binter, la cual no opera de manera regular. A ellos se sumaría, además, los puntuales vuelos privados que ocasionalmente utilizan la pista de Villanubla.

18.000 viajeros menos

La marcha de Ryanair tendrá un impacto notable en el aeropuerto de Valladolid, una terminal que ya de por sí acumula años de descenso de viajeros. Solo en el último año, Villanubla ha perdido algo más de 18.000 usuarios, el equivalente a un 9,4% menos que en 2023.

Según los datos de Aena, por la terminal vallisoletana pasaron a lo largo del pasado ejercicio 192.038 personas, lo que le sitúa en cifras inferiores a los aeropuertos de Pamplona, Vitoria o el de la isla de El Hierro. Aún así, se mantiene como el que registra más movimiento de toda Castilla y León.

Asimismo, en el mismo periodo de tiempo, Villanubla contabilizó 6.599 operaciones, unos 18 vuelos al día teniendo en cuenta tanto los comerciales, los privados y los de ocio. Por ponerlo en perspectiva, son alguno menos que el aeropuerto de la Región de Murcia.

Por otro lado, la mitad de los pasajeros del aeropuerto de Villanubla utilizaron en 2024 los vuelos de Ryanair, de forma que esta aerolínea generó el 50,9% del tráfico de viajeros de este aeródromo que compartió el año pasado durante algunos meses con otras tres compañías: Vueling, Binter y Air Nostrum.

Según los datos oficiales de Aena consultados por Ical, Ryanair movió el pasado año a 97.863 viajeros desde el aeropuerto de Valladolid -salidas y llegadas-, donde operó un vuelo a Barcelona durante todo 2024, además de otro a Palma de Mallorca entre abril y octubre. En conjunto, estas instalaciones sumaron 192.038 pasajeros, de los que más de la mitad correspondieron a la empresa irlandesa.

Asimismo, la compañía presentó un balance negativo en 2024 en Valladolid, donde sus vuelos perdieron un 5,5 por ciento de pasajeros, con 97.863, frente a los 103.573 de 2023. No obstante, superó el total de 2022, en la recta final de la pandemia, cuando sus aviones transportaron desde o hasta Villanubla a un total de 92.456 viajeros.

Por otra parte, la Junta de Castilla y León exigirá “de manera firme” explicaciones al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ante la pérdida de conexiones en el aeropuerto de Valladolid.

En declaraciones a Ical, fuentes de la Junta indicaron que defenderán ante el departamento de Óscar Puente las conexiones aéreas de Castilla y León, como han hecho, según indicaron de forma “reiterada”, en las reuniones del Comité de Coordinación Aeroportuaria. Ahora, tras conocer la decisión de la aerolínea irlandesa, avanzan que plantearán sus demandas “con un mayor nivel de exigencia”.

Asimismo, el Gobierno autonómico expresó su “preocupación” por la marcha de Ryanair e insistió en la necesidad de que el Gobierno de España desarrolle una política de incentivos “eficaz” para “salvaguardar” las conexiones de aeropuertos como el de Valladolid y de otros de su rango, como los de León, Burgos o Salamanca.

“Resulta paradójico que hace escasas semanas el ministro de Transportes anunciase en Valladolid su apuesta por recuperar rutas internacionales desde Villanubla y ahora se comunique la marcha de una de las operadoras que contaba con una actividad destacada en esta comunidad”, afirmaron desde el Ejecutivo autonómico, cuyas competencias en esta materia están encomendadas a la Consejería de Movilidad y Transformación Digital.

Finalmente, la Junta insistió en que reiterará estas exigencias para que el departamento de Óscar Puente trabaje para lograr “la recuperación” de la oferta en los cuatro aeropuertos de la Comunidad.