Un fallo de material provocó la rotura del anillo mil y la inundación del paseo del Cauce

Los operarios de AquaVall, empresa que gestiona el servicio de agua en Valladolid, trabajan en la reparación del anillo mil, la tubería que reventó este domingo en el paseo del Cauce y provocó la inundación de la zona en el tramo entre la carretera del cementerio y la avenida Palencia. Este lunes se ha localizado la fuga y ya se trabaja para repararla. La principal hipótesis que manejan es un fallo del material: "Todo apunta a un fallo del material, es una zona de paseo en la que no ha habido obras, ni hay tráfico, no ha habido invasión de raíces" , detalla el gerente de AquaVall, Pedro Arroyo. Si bien, es la principal idea, pero no está confirmada todavía. A lo largo de la semana cuando se analice la rotura en profundidad, se podrá confirman el motivo del reventón. 

"Vamos a aprovechar para ver si hay que arreglar algo más" , explica Arroyo. En este sentido, indica que el anillo mil es una "arteria principal" de la ciudad que se puede "aislar por tramos redirigiendo el caudal". Una maniobra que no perjudica al suministro de agua de Valladolid: "Desde el domingo al mediodía hay suministro de agua para la ciudad, al incidencia duró unas horas". 

Los operarios "abrirán la zanja para inspeccionar si hay algo más afectado" , a mayores del tramo averiado. Las reparaciones se están realizando en las proximidades del paseo del Cauce y la calle Jacinto Benavente, "entre las casas y el río", incide Arroyo. "Nos llevará unos días arreglar la avería, no sabemos el tamaño que tiene", apunta el gerente. Si bien, indica que "esta semana" estará solucionado, si no hay ningún inconveniente a la hora de realizar las obras. El suministro de agua está garantizado a toda la ciudad, lo queda "tranquilidad" al equipo de AquaVall para trabajar en una de las arterías principales de Valaldolid. Arroyo explica que "la tubería se encuentra a un metro" y se debe acceder a ella "despacio y con cuidado" porque un "golpe ahora son averías en el futuro". 

De momento es pronto y Arroyo explica que todo apunta a un "fallo del material" como motivo del reventón, pero también augura que "puede ser por un pequeño defecto, presión en algún hueco pequeño". Pese al reventón del domingo, asegura que el anillo mil "no está en el límite de su vida útil". "Por su tiempo y su estado, no está en una situación crítica", sentencia. 

Pedro Arroyo califica la avería de "escandalosa" y "no grave". El gerente explica que es norma que una arteria principal "suelte tanto caudal de agua" al haber un reventón. Este suceso provocó que los vecinos de la zona tuvieran que achicar agua y sacar las fregonas.