HUERTA DEL REY
El barrio que sirvió como primer ensayo de modernidad en Valladolid
Su trazado urbanístico comenzó a principios de los años 60 del siglo XX con parámetros modernos, pero no inauguró los primeros edificios hasta los 70 | El Ayuntamiento planeó que todas las promociones en Huerta del Rey fueran del mercado libre, pero el Instituto de la Vivienda de la Administración franquista obligó a combinarlas con vivienda social
Es sabido en la ciudad del Pisuerga que el nombre de las tierras al otro lado del río llevan el nombre de Huerta del Rey porque Felipe III ubicó en ellas su cazadero y la zona de esparcimiento de la familia real. Así permanecieron durante los cinco años en los que el monarca estableció la corte en Valladolid, entre el 11 de enero de 1601 y el 4 de marzo de 1606. Desde entonces, la zona continuó siendo rústica, tierras de labor y de huertas tres centurias y media más.
Pero desde finales del siglo XIX Valladolid albergó el proyecto de expandirse al otro lado del Pisuerga . Mucho antes del definitivo Plan Parcial de la primera fase de Huerta del Rey, aprobado el 26 de octubre de 1963, hubo varias propuestas innovadoras que ahora duermen el sueño de los justos en el Archivo Municipal. La primera de ellas, un curioso trazado cuadrangular, al modo de la Ciudad Lineal de Madrid o el Ensanche de Barcelona, trazado por Gutiérrez Lázaro en 1925.
Ese reto no se acometió hasta principios de la década de los 60 del siglo pasado , y tardó en tomar cuerpo. Desde la expropiación de los terrenos de esa primera fase por el entonces denominado Instituto Nacional de la Vivienda , en plena Administración de Francisco Franco –una actuación fechada el 25 de octubre de 1961–, hasta la construcción de los primeros edificios pasaron más de diez años.
Valladolid
De La Esperanza a un nuevo rumbo: el barrio de Valladolid que volvió a empezar
santiago-g-del-campo
Ya avanzado el asentamiento de los barrios obreros de Valladolid, especialmente las Delicias y Pajarillos, comenzó la ocupación de Huerta del Rey , un antiguo plan del Ayuntamiento que quería configurar un área de excelencia que pasó a manos del Ministerio de la Vivienda. Tanto es así que varias calles han llevado hasta hace poco tiempo nombres de ministros de la Vivienda de la época como José Luis Arrese, Sánchez Arjona o Vicente Mortes.
Pese a que el Consistorio buscaba una zona de alto poder adquisitivo con viviendas en el mercado libre, aquel Ministerio franquista obligó a combinarlas con viviendas sociales . El modelo del plan parcial ocupaba grandes extensiones de suelo vacante con nuevos fragmentos urbanos dotados de todas las infraestructuras y servicios.
Finalmente, esa primera fase terminó con dos edificios construidos por la entonces denominada Obra Sindical del Hogar , con 604 viviendas sociales, y otros dos promovidos por el Instituto de la Vivienda, con otras 224 viviendas. El total de ese plan parcial inaugural contó con nueve promociones que se extendieron a lo largo y ancho de 77 hectáreas, con 1.802 viviendas . La segunda fase, con una previsión de 3.602 viviendas, se había aprobado ya en 1974, aunque en 1979 se modificó. Terminaron por construirse a lo largo de los años 80 un total de 35 promociones, 11 de ellas públicas, que habilitaron 3.194 viviendas sobre un suelo de 93 hectáreas y media.
La concepción del barrio, con nuevas construcciones en torre y amplias avenidas, pecó, sin embargo, de un diseño demasiado volcado en el uso residencial, y durante muchos años, aún ahora, presenta algunas deficiencias como la falta de comercios de proximidad y espacios peatonales, incluso de parques y jardines en las zonas más antiguas.
Eso sí, la nueva zona urbana comenzó a albergar modernos equipamientos. Uno de los primeros, el más ambicioso polideportivo de la época , que comenzó a construirse en 1973. También se levantó un edificio administrativo de usos múltiples que ha marcado la vida del barrio durante cinco décadas, en cuyos alrededores se edificó después el ‘Gobierno Civil’, hoy Delegación y Subdelegación del Gobierno , y la Consejería de Economía y Hacienda . En otras áreas, más al norte, se ubicaron la Feria de Muestras, las consejerías de Agricultura y Fomento y Medio Ambiente ...
Desde aquellos tiempos en los que la explanada de Usos Múltiples servía de caótico aparcamiento, con ‘gorrillas’ incluidos, desde los 70 a los 90, hasta albergar ahora la emblemática Cúpula del Milenio con sus jardines aledaños, el lugar ha experimentado un radical cambio de imagen.
No ha sido tan espectacular, sin embargo, la evolución de la población. De hecho, el censo en Huerta del Rey ha descendido un destacado 36,4% desde los 20.291 habitantes registrados en 1991 a los 12.896 registrados a 1 de enero de este año. Y podrían ser menos en años posteriores atendiendo al envejecimiento de población. No hay más que examinar los números: por cada niño de Huerta del Rey hay cuatro jubilados . Un total de 1.222 vecinos son menores de 14 años (el 9,48%), y 4.706 ya han cumplido los 65 (el 36,49%). Y es que, pese a que las calles se trazaran con ese espíritu de modernidad de cuando las ciudades comenzaron a tomarse el urbanismo en serio, el concepto de residencial ya está superado y tiene sus inconvenientes .
Así lo pone de manifiesto el presidente Asociación de Vecinos ‘Pisuerga’, Juan Carlos Puente: « Una de las principales carencias del barrio es la falta de comercio de cercanía, pese a ser una zona tan extensa . Otro problema es el de los autobuses a centros de referencia sanitarios. Por ejemplo, para ir al Hospital Río Hortega tienes 35 minutos de autobús . Solo hay una parada en la Feria de Muestras», lamenta.
«Debería haber más paradas en el barrio, pero no nos dan solución» , añade. «Una persona mayor que quiera ir al Mercado del Val, para coger el autobús tiene que ir a María de Molina. Y para ir al centro de especialidades de Arturo Eyríes tienes que ir a El Corte Inglés y hacer trasbordo para coger un autobús que te vuelve a cruzar el río».
También denuncia la «degradación» de los alrededores de la calle Rastrojo , cerca del ambulatorio. «Es una zona un poco más deprimida. En los alrededores hay tráfico de drogas, carreras de coches... pedimos más vigilancia, pero no nos hacen caso. Nos venden que hay una Policía de barrio pero no la vemos», denuncia. Una situación que influye en el colegio Giner de los Ríos, «con muy buenas dotaciones, pero con muy pocos alumnos porque se está convirtiendo en un gueto», lamenta, a la vez que insta a las administraciones a buscar soluciones.
Es en la zona de la Plaza del Milenio donde «los problemas nunca han existido». Ahora los vecinos tienen la expectativa de la reapertura del antiguo Museo Gabarrón que estuvo cerrado mucho tiempo, pues se ha convertido en un edificio administrativo que «está dando vidilla a la zona», concluye. ALGUNOS NÚMEROS
Población: A 1 de enero de 2022: 12.898 habitantes (6.218 en la zona alta, 1.934 en la baja, 2.843 en la media y 1.901 en Gavilla). Renta: Con 25.556 euros, se sitúa igeramente por encima de la media de la ciudad, que registra 23.515. Centros Educativos: Cinco colegios (CEIP), dos institutos (IES) y la Facultad de Arquitectura. Hay dotaciones singulares como la Feria de Muestras y la Cúpula del Milenio.