La «fuerza imparable» de la mujer toma la calle
Miles de vallisoletanos recorren el centro de la ciudad para reclamar la igualdad real, el fin de la brecha salarial o de las violencias machistas / «Tiene que existir un compromiso de la sociedad los 365 días del año»
Un año más, un 8 de marzo más, con motivo del Día Internacional de la Mujer , las calles de Valladolid se volvieron a teñir de morado para reclamar la igualdad real de las mujeres, mostrar la «fuerza imparable del feminismo» y luchar por el fin de la violencia de género.
Al son del ritmo que marcaban las batucadas y de los cánticos que lanzaban mensajes como '¡Así, así, ni un paso atrás!’, ‘¡La calle y la noche también son nuestras!’, ‘¡Con ropa o sin ropa mi cuerpo no se toca!’ o ‘¡A igual trabajo, igual salario!’, cerca de 3.500 personas , según fuentes de la Policía Nacional, recorrieron el centro de Valladolid y se sumaron así al encuentro reivindicativo.
Loas voces de todas esas personas; niñas, jóvenes, mayores, mujeres, hombres , algunas con pancartas, otras con camisetas o complementos morados con mensajes feministas se unieron ayer con el objetivo de condenar la discriminación hacia la mujer y reclamar cambios en aspectos como las condiciones laborales.
«Volvemos a estar en las calles sabiendo que esto ni empieza ni acaba el 8 de marzo, el feminismo es una fuerza imparable».
Así comenzó el manifiesto leído en la plaza de Portugalete , punto donde finalizó una manifestación, convocada por la Coordinadora de Mujeres de Valladolid, que se abrió paso por las calles de la ciudad con una pancarta que recogía un rotundo mensaje: ‘Feminismo, fuerza imparable’.
En esta lectura, ante la presencia de miles de vallisoletanos, también se hizo un reconocimiento al movimiento feminista. «Es una tradición intelectual y un movimiento social que lleva tres siglos creciendo y promoviendo una sociedad más justa, logrando que algunos derechos no sean ya cuestionados».
«¡Basta ya de agresiones, humillaciones, marginaciones o exclusiones!» se clamó para pedir el fin de las violencias machistas; a la vez que se exigieron cambios en distintas materias para hacer frente a las peores condiciones laborales, los techos de cristal o la precariedad laboral, entre otras.
Estos fueron algunos de los mensajes que más se repitieron durante la celebración de esta jornada y que recordaron los representantes de los colectivos sociales, sindicales y feministas que participaron en la marcha. «Queremos vivir en igualdad», aseveró Nina Infante, presidenta del Foro Feminista, que señaló que el 8 de marzo es «el día de la reivindicación de todas las mujeres del planeta, sean de donde sean».
En esta misma línea, la secretaria de Política Social y Vivienda de CCOO , Inmaculada de Pablo, que manifestó que estas reivindicaciones son «de hoy y de ayer», apuntó que el objetivo es conseguir el derecho a la igualdad «en todas las facetas» de la vida, como la educación o el trabajo.
Además, De Pablo lamentó que las protestas del 8 de marzo son «insuficientes».
«Tiene que existir un compromiso de la sociedad de reivindicar el derecho a la igualdad los 365 días del año».
«Salgo a la calle no solo para luchar contra las desigualdades que existen como la brecha laboral o el techo de cristal, sino también porque, en los últimos años, la violencia machista y las violaciones en grupo no se está tomando todo lo en serio que se tendrían que tomar», criticó Cristina Vielba , una joven que por tercer año consecutivo volvió a salir a la calle en esta jornada.
Además, lamentó que la situación actual que se vive en el mundo, marcada por el coronavirus , ha generado que la gente esté «menos motivada» y «no salga tanto a luchar».
MAREA MORADA
La gran marea morada también contó con la presencia del secretario general de CCOO, Unai Sordo y el de Castilla y León, Vicente Andrés ; la presidenta de los socialdemócratas en el Parlamento Europeo, Iratxe García ; la senadora socialista, Teresa López ; la eurodiputada por Cs, Soraya Rodríguez ; o el alcalde de Valladolid, Óscar Puente , entre otros.
«Todavía queda mucho por reivindicar y avanzar», lamentó el alcalde de Valladolid, aunque destacó que el 8 de marzo es una jornada «importante» para «poner el acento» en aquellos elementos que son «barreras que dividen esta sociedad».
Asimismo, Puente criticó la discriminación que sufre la mujer a la hora del acceso a determinados puestos de trabajo o la falta de corresponsabilidad del hombre en el hogar.
«Se ha avanzado mucho en los últimos años, pero aún queda un terreno importante en el que hay que progresar», sentenció.
A esta manifestación, que formó parte de las actividades programadas en la ciudad con motivo del Día Internacional de la Mujer, se sumó otra más por la tarde, que partió de la plaza Mayor a las 19:00 horas y finalizó en la plaza de Portugalete.