Puente defiende que recaudar más es la única vía para prestar unos servicios al alza
Afirma que 2 millones de euros más por subir el IBI es poco frente a 10 millones que no se ingresan tras quitar la tasa de basura
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El alcalde, Óscar Puente, defendió ayer la decisión de su equipo de gobierno de actualizar al alza los valores catastrales, lo que conllevará un incremento del Impuesto de Bienes Inmuebles, el IBI, que pagan los vallisoletanos, como la «única manera» de atender las necesidades crecientes de los ciudadanos.
El IBI es el impuesto con el que más dinero recauda el Ayuntamiento, en torno a 70 millones de euros al año, y con la puesta al día de los valores catastrales de las viviendas se incrementará en dos millones. Una cantidad que a Puente le parece modesta si se compara con los 10 millones de euros que dejó de ingresar el Ayuntamiento a partir de 2015 con su decisión de suprimir la tasa de basura que instauró el equipo municipal del Partido Popular en el año 2013.
Tras echar cuentas, el regidor subrayó que los dos millones que ingresarán a mayores a partir de 2020 apenas representan el 20% de los 10 millones que dejaron de percibir desde 2015. Con la revalorización catastral y el consiguiente incremento del IBI, el alcalde rompe con la línea mantenida durante su primer mandato de no tocar los impuestos. Ahora lo hace, aunque de manera indirecta dado que el incremento es consecuencia de la revisión del valor catastral.
Pese a esta subida en el tributo municipal más importante en cuanto a recaudación, el regidor dijo que el Ayuntamiento «sigue haciendo gala» de una política de «contención fiscal», aunque insistió en que es necesario «actualizar ingresos porque las necesidades van creciendo». Para Puente ambas cosas, la política de contención fiscal y el aumento de la recaudación para prestar unos servicios que van en aumento, son coherentes, como también lo es reclamar más fondos a la Junta de Castilla y León. «No tendría sentido que yo le reclamara más dinero a la Junta para atender los servicios sociales y a la vez me dedicara a bajar impuestos», añadió
La decisión del Ayuntamiento de Valladolid va en la dirección opuesta al anuncio hecho por algunas comunidades autónomas gobernadas por el PP, Ciudadanos y Vox, caso de Madrid, de bajar los impuesto. Y aquí sí que Puente observó una «contradicción insalvable» pues mientras «esas comunidades que están bajando impuestos a la vez piden a papá Estado más recursos».
El alcalde respondió también a la presidenta del PP en el Ayuntamiento, Pilar del Olmo, quien consideró carente de sentido una subida de impuestos en Valladolid cuando el Ayuntamiento tiene superávit todos los años, lo que revela que los ingresos son mayores que los gastos, y todo indica que también lo tendrá en el ejercicio vigente.
Para Puente, el planteamiento de Del Olmo, ex consejera de Hacienda de la Junta, lo que hace es «simplificar las cosas de una manera irresponsable» y advirtió de que cuando se habla se superávit «hay una pequeña trampa» dado que el Ayuntamiento, como el resto de administraciones, tienen limitadas sus posibilidades de actuación por el techo de gasto. Según desveló ayer el alcalde en los cuatro últimos años, el Ayuntamiento cumplió «por los pelos» con el techo de gasto, hasta el extremo de que en alguna anualidad no se superó por apenas 50.000 euros. El aumento de la recaudación por el IBI en dos millones de euros tendrá como consecuencia un incremento del techo de gasto municipal en la misma cantidad, un dinero que «se va a poder gastar» dijo el alcalde, quien matizó que de no hacerlo así «no podría gastarse».
La actualización de los valores catastrales que acometerá el Ayuntamiento no se realiza desde 1994, hace por tanto 25 años. Dado que la recomendación es que se pongan al día cada 10 años, el equipo de gobierno municipal consideró necesario hacerlo ya y sin dilación, en el primer ejercicio presupuestario del nuevo mandato.
El concejal de Planificación y Recursos, Pedro Herrero, encargado de cuadrar las cuentas municipales, dijo al anunciar la decisión que «no es agradable, pero ha llegado el momento de hacerlo».
Las subidas de impuestos siempre son impopulares y nada hace pensar que esta vez no vaya a ser así. A esto hay que añadir, por las declaraciones de la presidenta del Partido Popular en el Ayuntamiento, que la oposición lo utilizará como una baza contra Puente y su equipo.