Dos detenidos por ocho robos en explotaciones agrícolas de Valladolid

La Guardia Civil de Valladolid, dentro de la denominada operación 'Borne', detuvo a C.B.R, de 25 años y B.A.S.D, de 21, como supuestos autores de ocho delitos de robo con fuerza en explotaciones agrícolas-ganaderas de Iscar, Bahabon, La Cisterniga, Nava del Rey, Pozaldez, y Cogeces de Iscar, según informaron hoy fuentes del instituto armado en un comunicado.

Al parecer, se dedicaban al robo de baterías, tanto de motores de riego como de tractores. De hecho, uno de los detenidos acumula hasta 22 detenciones por delitos contra el patrimonio.

El equipo Roca de Valladolid tuvo conocimiento de los robos y hurtos en explotaciones agrícolas y ganaderas, ocurridos durante los meses de abril y mayo en la provincia de Valladolid, sustrayendo los autores principalmente las baterías de los motores de riego, baterías de tractores, cableado de cobre, tubos y aspersores de riego. En algunos casos se hicieron con los propios motores de riego y el gasoil.

De esta forma, comenzó la operación denominada 'Borne', lo que permitió analizar todos los robos, estableciendo varias líneas de investigación. Por un lado se realizaron numerosas gestiones en los lugares de comisión y entrevistas con agricultores de la zona para recabar datos sobre personas sospechosas.

De igual manera se estableció un control del destino de los objetos sustraídos, examinando la venta de estos productos en los canales que existen (establecimientos autorizados), realizando en este sentido numerosas inspecciones.

Fruto de las gestiones practicadas, se consiguió ubicar en la zona de los robos a dos vehículos, con los que los autores se desplazaban para cometer los diferentes delitos y transportar el material sustraído, así como identificar a dos personas, vecinos de la localidad de Iscar., informa Ical.

Modus Operandi

El modus operandi consistía en la sustracción de materiales de todo tipo, preferentemente baterías y material de riego (aspersores y llaves de riego), que eran vendidos en diferentes centros autorizados, obteniendo así un "rápido y limpio" beneficio económico. Además, para evitar ser localizados por las fuerzas de seguridad, dividían las ventas en pequeñas cantidades y días para dificultar la labor policial.

También se comprobó que la cantidad de metales vendidos por estas dos personas durante la investigación rondaría los 1.213 kilos de baterías y 186 kilos de aluminio, habiendo obtenido un beneficio económico de más de 2.000 euros.

La sustracción de las baterías en los motores de riego, no solo supone la pérdida del valor económico de la propia batería, sino que puede llegar a ocasionar graves daños en el mecanismo del motor, ya que sin la corriente que suministra la batería, pueden dejar de funcionar varios sistemas de seguridad, teniendo en cuenta que el valor de un motor de riego, estaría entre los 4.000 euros y 10.000 euros.

Tras la detención, fueron puesto, jutno con las diligencias, a disposición del Juzgado de Guardia de Valladolid. No obstante, la Guardia Civil continúa con las gestiones para esclarecer otros robos.

Equipos Roca

Esta actuación se enmarca dentro del Plan Revitalización contra Sustracciones en Instalaciones Agrícolas y Ganaderas, por lo que se crearon los Equipos Roca con el fin de incrementar la seguridad de estas explotaciones mediante una vigilancia permanente y una mayor comunicación con los colectivos afectados.

Desde la Guardia Civil recuerdan que ante cualquier sospecha de vehículos o persona que puedan cometer algún ilícito penal, está a disposición del ciudadano el teléfono de emergencias de la Guardia Civil 062.