El promotor culpa a Bustamante de presentar «un informe falso»
Fernández Bécares remarca que la enfermedad alegada por el cantante «puede ser cierta»
Imagen de archivo de David Bustamante.-EL MUNDO
«Las cosas son muy delicadas, no se puede disculpar y ya». Ese es el juicio que hace Miguel Fernández Bécares, el promotor del concierto de David Bustamante en Laguna, sobre uno de los casos más populares del panorama nacional.
Fernández Bécares remite a la investigación de Sanidad para recordar que el parte «está hecho en un documento público que el médico no podía utilizar por encontrarse fuera de su horario de servicio. En el informe pone que hubo un ingreso y un alta en el Clínico, así como una cama de urgencias ocupada. Esto ya se ha demostrado que es mentira porque Bustamante no ha estado en ese hospital, para empezar. Lo de la enfermedad puede ser cierto, pero el parte presentado es falso».
Cuestionar la veracidad de la supuesta afonía que justificó en su momento la cancelación del evento «no lo puedo hacer porque hay información que desconozco. Lo único que está claro es que el parte presentado es muy confuso y las explicaciones que ha dado la Consejería son muy escuetas», explica, confesando que las disculpas por la suspensión «se aceptarán, pero no son suficiente. Lo que se ha hecho es muy grave, la utilización de un documento público sin autorización es un delito».
Como reconoce el promotor, la suspensión ha supuesto un «perjuicio» hacia su empresa así como hacia el Ayuntamiento y el pueblo lagunero, los cuales esperaban con ansia este concierto que era cabeza de cartel en las prefiestas.
«Alrededor de a la una de la tarde del sábado me llamaron para cancelar el concierto. Automáticamente, se lo notifiqué a las autoridades de Laguna de Duero y a ellos les exigí un certificado médico que justificase lo que me contaban. Una hora después me enviaron el informe que yo remití al Consistorio. Tras ello, mantuvimos una reunión de urgencia para hacerlo público», recuerda.
En el momento en que se canceló la actuación, Fernández Bécares recuperó «el cheque conformado que le había entregado al manager y, posteriormente, me ingresaron el resto del dinero. Es decir, me han devuelto el caché del artista, casi 36.000 euros».
Sin embargo, lo que no va a recuperar son las pérdidas ocasionadas por los gastos de producción de un concierto que se llevaba preparando unos cuatro meses con su publicidad correspondiente.
«De estos gastos, que serán unos 25.000 euros o más, la agencia me dijo que no se iba a hacer cargo de nada. Si iniciase alguna acción legal, que aun lo estoy valorando, sería para recuperar un dinero que he puesto y que estoy perdiendo. Yo tenía mucho trabajo aquí hecho ya», concreta.
El promotor desestima que el concierto se suspendiera por no vender entradas suficientes. «Se esperaba llegar a las 3.000 en taquilla, un aforo bastante considerable hasta para un artista internacional».
Según concisa fue el propio sábado cuando aparecieron los problemas pues «ya estaban todos los equipos montados y el pago efectuado en su totalidad».