Diario de Valladolid

Un huerto para concienciar y cambiar hábitos

El Pinar de la Rubia y el Alonso Berruguete cultivan hortalizas con fines solidarios

Alumnos de secundaria de El Pinar de la Rubia durante las tareas de parcelación.-J. M. LOSTAU

Alumnos de secundaria de El Pinar de la Rubia durante las tareas de parcelación.-J. M. LOSTAU

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Enrique Zamorano

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Tomates, brócolis, fresas, guisantes, calabazas, zanahorias... Los alumnos del instituto El Pinar de la Rubia y del colegio Alonso Berruguete llevan desde enero inmersos en el proyecto en red `Huertos Urbanos’ que está destinado al cultivo de hortalizas y frutas con fines educativos y solidarios.

«Es muy necesario cambiar hábitos y lo mejor para ello es empezar desde pequeños», afirma Amalia Molina, maestra del Pinar de la Rubia y coordinadora del plan. La educadora asegura que «la idea es que empiecen en infantil. Los niños están muy ilusionados y desarrollan habilidades como el trabajo en equipo, además de valores solidarios».

La iniciativa está abierta a toda la comunidad educativa:padres, profesores y alumnos se involucran en la plantación de distintos frutos originarios de la tierra para más tarde ponerlos a la venta. El dinero que se recaude irá destinado a la ONG Entreculturas para ayudar a las víctimas y afectados por el reciente terremoto de Ecuador.

«Al principio nos llevó mucho trabajo, pero una vez empiezas te vas dando cuenta de la cantidad de valores que desprende esta activdad. Sobre todo, valorar la comida sana y la vida saludable», señala Molina.

El plan se gestó en septiembre. La idea surgió de un encuentro nacional de profesores en Madrid.

En el documento del proyecto se remarcan los objetivos: tomar conciencia ecológica, conservar y cuidar el entorno, fomentar la autonomía personal y desarrollar habilidades sociales, afectivas y comunicativas entre el alumnado para crecer en valores. A la hora de llevar a cabo el proyecto, profesores y alumnos recibieron la formación de la Esuela Universitaria de Ingeniería Agrícola(INEA) y la colaboración del Ayuntamiento de Valladolid.

Los alumnos, por su parte, participan activamente como protagonistas principales, y a la vez destinatarios, de todo el proceso. Y no solo alumnos, también padres. Según el documento, todas las asociaciones de padres y madres de alumnos de los colegios que conforman el proyecto en red aprobaron la creación de huertos y viveros y colaboraron con la aportación de envases, semillas, esquejes o abono orgánico. Además, también están implicados en la parcelación y laboreo.

El huerto se inaugurará oficialmente el día 3 de Junio y se invitará al Consejero de Educación, Fernando Rey, al inspector escolar y a miembros de INEA, quienes prestaron su ayuda en la realización de los cultivos.

«Toda la actividad tiene un gran valor metafórico y humano», recalca Molina. Añade que «quitar las malas hierbas significa que también nosotros debemos arrancarnos las malas hierbas que hay a nuestro alrededor. Nosotros crecemos como personas, al igual que los productos de la huerta».

El día de la inaguración se realizará una exposición que mostrará el progreso de la plantación titulada ‘La Naturaleza es Poesía’, con poemas de Juan Ramón Jiménez y Antonio Machado relacionados con la naturaleza. Además, una profesora dirigirá un taller de haikus para fomentar la creatividad y la expresión artística entre los alumnos.

«Para la sociedad de hoy en día es muy importante el compromiso y es algo que debemos fomentar entre los más pequeños», puntualiza la maestra.

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