La Junta prevé que en otoño esté listo el transporte metropolitano de Valladolid
La Consejería asumirá las compensaciones a los operadores y destina más de 200.000 euros a los cambios tecnológicos del proyecto
La Junta de Castilla y León prevé que en otoño esté listo el transporte metropolitano del área funcional estable de Valladolid. La Consejería de Fomento y Medio Ambiente está invirtiendo unos 200.000 euros en la adaptación tecnológica de los diferentes sistemas tecnológicos y asumirá las compensaciones de los operadores por la diferencia entre el coste del servicio y el precio del bono.
Así lo aseguró hoy el director de Transportes, Ignacio Santos, que ofreció una charla informativa sobre el estado del proyecto de implantación del Área Metropolitana en Valladolid y pueblos del alfoz. Santos explicó que se comprometió a informar sobre esta iniciativa a los vecinos en una reunión con responsables municipales celebrada en noviembre. Además, el concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Valladolid, Luis Velez, también acudió a la cita.
En ese sentido, el director general de Transportes sostuvo que los plazos del transporte metropolitano de Valladolid se mantienen y estimó que en otoño entrará en funcionamiento, debido a que se trata de una exigencia tecnológica. Antes, Ignacio Santos señaló que se incrementarán las pruebas pilotos realizadas en Zaratán y Renedo a más usuarios, y posteriormente, a Laguna de Duero y Arroyo de la Encomienda, con el objetivo de verificar la compatibilidad de los diferentes equipos.
Asimismo, el responsable de Transportes de la Junta explicó que las aportaciones de los ayuntamientos no variarán ya que señaló que la Junta está asumiendo la inversión de la adaptación tecnológica, que incluirá también la creación de una oficina en la estación de autobuses de Valladolid.
Finalmente, el director señaló que el Gobierno autonómico se hará cargo también de las pérdidas que supongan para los operadores los bonos, entre 600.000 y 800.000 euros, a los que se unirán las ayudas para compensar los déficit de explotaciones de las concesiones rurales, entre 400.000 y 500.000 euros. Todo ello sufrirá una nueva transformación cuando se liciten y adjudiquen los nuevos títulos concesionales en 2019.