Sucesos
Cinco detenidos relacionados con altas fraudulentas de líneas de telefonía
Una persona estafada recibió un cargo en su cuenta de 875 euros y otra de 853 euros
Agentes de la Policía Nacional en Valladolid detuvieron ayer a J.L.R.M., de 49 años y con nueve antecedentes por hecho similares, y de D.J.J., de 33 años y tres antecedentes, por un presunto delito de estafa. En la misma operación fue arrestado L.F.R.M. de 28 años por un presunto delito de receptación. Los tres tienen nacionalidad española.
El 'modus operandi' en este tipo de estafas consiste por un lado, en utilizar identidades para dar de alta normalmente entre 3 y 4 números de teléfono móvil. Por otro lado, utilizan datos bancarios de esta persona o de otra para efectuar el pago y por último, los terminales, que reciben gratuitamente por el alta de esas líneas, son entregados a la persona que realiza la estafa.
A través de estas líneas de teléfono se realizan llamadas de alto coste cuyos recibos llegan a los supuestos titulares de un contrato que nunca han realizado. En otras ocasiones los estafadores venden los teléfonos a un tercero de buena fe que piensa que está adquiriendo una ganga de segunda mano.
En este caso concreto, y tras una laboriosa investigación del Grupo de Hurtos del Centro Policial de Parquesol, la Policía constató que uno de los detenidos se dedicaba a la captación de datos tanto de identidad como bancarios de posibles víctimas; otro colocaba los teléfonos en el mercado de segunda mano y el último, valiéndose de un comercio en el que trabaja, los vendía como legales.
A un perjudicado le realizaron varios cargos en su cuenta procedentes de estos teléfonos, siendo el más llamativo uno por valor de 853 euros. J.L.R.M. pasó a disposición de la autoridad judicial en la mañana de hoy y el resto de los detenidos quedó en libertad en dependencias policiales.
Asimismo, el pasado día 21 se detuvo a F.J.A.P. y B.I.G., ambos sin antecedentes de 48 años y de nacionalidad española, por un presunto delito de estafa. Esta pareja que regentaba un comercio dedicado a la distribución de productos de telefonía obtenía los datos de los perjudicados por ser éstos posibles clientes que se acercaban a su negocio.
A una víctima le dieron de alta cuatro líneas de teléfono a su nombre y una de las facturas asciende a 875 euros.
Las dos investigaciones fueron realizadas por el perteneciente a la Comisaría Provincial de Valladolid.