Primer paso para acabar con la interinidad docente
EL CURSO ESCOLAR ya está ahí, a la vuelta de la esquina y lo hace, como ya se ha dicho desde estas mismas páginas, con más alumnos y con más profesores. Una realidad que no puede hacer esconder la interinidad que sufre la docencia en esta Comunidad. Lo denuncian los sindicatos y los números vienen a refrendarla con tozudez.
Pero, dicho esto, es cierto que desde la Consejería de Educación, una vez levantado esa tasa de reposición que era prácticamente un veto plantado por el anterior gobierno de Mariano Rajoy, se han dado los pasos para ir acabando con esa interinidad. Y los números ahí también son tozudos, lo que sucede es que el camino a recorrer aún es largo.
En estos momentos, los puestos que quedan para la interinidad disminuyen, pero eso sí la mayoría de tiempo parcial o itinerante, son las que atañen peores condiciones puesto que las vacantes de jornada completa se adjudican a quien tiene aprobada la oposición, según indican desde los sindicatos.
Una situación que previsiblemente se produzca en los próximos cursos puesto que es un fenómeno que se repite cada año que se convocan oposiciones y como se han hecho dos y faltan por realizarse otras dos de las previstas por la Consejería es algo que seguirá pasando, argumenta.
Por provincias, todas las provincias acaparan nuevos docentes. Burgos es el territorio que más de esas nuevas plazas de oposición recoge, al igual que Valladolid. Estas plazas de nuevos profesores en la práctica totalidad del territorio autonómico irán destinados a la Educación Primaria, seguidos de los maestros de Filogía Inglesa que se encargan de esa lengua y los de Educación Física y Pedagogía Terapéutica.
Después de Burgos y Valladolid, de las vacantes en las nueve provincias que se han cubierto con la última oposición, cabe destacar las de Segovia, de León, y de Ávila. Salamanca y Soria son las provincias que menos plazas sacaron a oposición. Les siguen Zamora y Palencia.
Pero, dicho esto, es necesario seguir trabajando rebajar la interinidad porque, parece claro, que pese al recorte la interinidad sigue siendo mucha y es obligado continuar reduciéndola. Entre otras cosas, como bien se denuncia desde las centrales sindicales, para acabar con una plantilla tremendamente envejecida. Y es que aunque estas incorporaciones aliviarán ese ratio, la realidad es que se vienen cursos con muchas jubilaciones y seguirá habiendo vacantes y sustituciones que cubrir.
El camino está trazado y se está recorriendo bien pero para mantener la calidad educativa de la Comunidad es obligado acabar con la interinidad docente.