Apostar por los autónomos contribuye a hacer Comunidad
CASTILLA y León es una de las comunidades de España con mayor peso de los autónomos en la actividad económica y en el empleo. El hecho de que sea una de las regiones que cumple mejor la Ley de Morosidad en cuanto al pago de servicios y productos por parte de las comunidades autónomas y las administraciones locales fortalece la estabilidad de este colectivo, favorece la economía regional y permite incluso competir en mejores condiciones con otras comunidades.
Sin embargo, los datos oficiales ponen de manifiesto que Castilla y León lidera la pérdida de trabajadores y emprendedores autónomas, aunque este retroceso se ha ralentizado en los últimos meses. El deterioro del sector comercial y algunas actividades vinculadas al turismo están causando estragos en este colectivo.
El último informe semestral de Morosidad de la Federación Nacional de Asociaciones de Autónomos (ATA) pone en buen lugar a la Administración autonómica, a las diputaciones y a los ayuntamientos; en el caso de las administraciones locales, con alguna excepción. El estudio llega a situar a Zamora es como el ayuntamiento de España que mejor cumple en el pago a sus proveedores autónomos.
Esta posición favorable representa de hecho un reconocimiento y una sensibilidad con un colectivo que crea y mantiene empleo, pese a sus mayores dificultades por subsistir y por financiarse. Evita desgastes y gastos adicionales en intereses.
Atender las reivindicaciones en materia de protección social de este colectivo va más allá de mejorar sus condiciones de trabajo. Supone un acicate para los jóvenes que desean introducirse en el mundo del emprendimiento. También un avance frente a los notables desequilibrios y discriminaciones respecto a los asalariados.
Los efectos de la crisis económicas se han notado y mucho en el impacto en estos emprendedores de la falta de recursos de las administraciones que incurrían en morosidades severas con los consiguientes perjuicios sobre uno de los eslabones más débiles de la economía.Esta situación ha ido mejorando, lo que ha permitido sanear sus cuentas y como mínimo reducir los abusos que se venían cometiendo incluso desde el sector público.
Apostar por mejorar incluso más el pago a los autónomos por partes de las administraciones públicas supone un compromiso y una apuesta por la actividad y el empleo, y en definitiva una forma de hacer Comunidad porque la estructura de buena parte de la economía de Castilla y León depende de ellos.
No hay que olvidar incluso que son los autónomos los que están contribuyendo en municipios pequeños a fijar población. Evitar costes mayores de endeudamiento por impagos es una aportación al compromiso por el empleo. Castilla y León es tierra de autónomos y su aportación a la Comunidad resulta imprescindible.