Diario de Valladolid

Cuatro ejemplares de limusina que arrasan en el Salón del Vacuno 2023

La burgalesa Granja el Arenón vuelve a triunfar en Salamanca con tres novillas y un macho que destacan por su morfología / «Es la raza que más se está expandiendo a nivel nacional y mundial»

Aitor Sainz Maza, de Granja el Arenón (derecha),  en la última edición del Salón del Vacuno de Salamanca con el ejemplar de raza limusina que obtuvo el primer premio. / GRANJA EL ARENÓN

Aitor Sainz Maza, de Granja el Arenón (derecha), en la última edición del Salón del Vacuno de Salamanca con el ejemplar de raza limusina que obtuvo el primer premio. / GRANJA EL ARENÓN

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Diego Santamaría

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Pleno al cuatro con las tres novillas y el macho que se presentaron al séptimo Concurso de Raza Limusina del Salón del Vacuno de Salamanca . Todo un éxito para Granja el Arenón, situada en la localidad burgalesa de Quisicedo de Sotoscueva. «Ni loco esperaba esto», reconoce Aitor Sainz Maza, propietario de la explotación junto a sus padres, orgulloso de haber logrado «algo verdaderamente increíble». Lo que está claro, aunque no lo diga él, es que el esfuerzo ha vuelto a dar sus frutos tras el premio obtenido el año pasado con uno de sus ejemplares. 

Cuadriplicó la apuesta y triunfó. Medalla de oro para una novilla de 23 meses, de plata para otra de 11 y dos cuartos premios para un macho de 9 meses -«probablemente, el más joven de la feria»- y una hembra de un año. Como es menester, el jurado valoró la morfología de los animales para determinar cuáles son capaces de ofrecer el «mayor rendimiento posible». Para ello, las secciones se distribuyen por edades (de tres en tres meses). 

No cabe duda de que obtener tan buenos resultados constituye una «publicidad muy buena» para darse a conocer. Pero lo mejor, apunta Sainz Maza, es la posibilidad de estrechar lazos con otros ganaderos y poder analizar «en qué punto estás» . Dada la coyuntura actual, con la inflación todavía campando a sus anchas y un sinfín de factores externos que afectan de pleno al sector, lo de que la unión hace la fuerza no es una frase hecha sino una realidad sumamente necesaria. 

La ganadería en general atraviesa una situación «bastante complicada» y los criadores de limusina no se libran. Desde la irrupción del covid, las materias primas empezaron a encarecerse y la guerra de Ucrania agravó aún más si cabe el panorama. Por si fuera poco, una «sequía histórica» puso en jaque a los profesionales del sector primario. En LasMerindades, comarca donde se ubica Granja el Arenón, ni los más viejos del lugar recordaban algo parecido. 

Ante tales circunstancias, hubo quienes se vieron obligados a «invertir mucho en alimentación» y, en el peor de los casos, a «reducir la cabaña ganadera». Con las materias primas «por las nubes», el margen de beneficios se encuentra «bastante ajustado». Afortunadamente, la limusina mantiene buenos precios, tanto para consumo como para reproducción, y en el caso de el Arenón «las ventas van viento en popa». El tesón, tal y como quedó patente en el Salón del Vacuno, tuvo su recompensa y «a raíz del año pasado nos han ido conociendo un poco más». No en vano, la explotación ya comercializaba ejemplares antes de aquel primer galardón en distintos puntos de la geografía española como Galicia o Teruel. Y en toda la provincia de Burgos, obviamente. 

La base genética es un factor clave para seguir avanzando dentro del sector. Se requiere una «selección muy cuidada» y Sainz Maza se muestra partidario de «crecer poco a poco». Mejor despacio y sobre seguro que «muy rápido guardando mucha recría» porque «igual te dejas otras cosas por el camino». Así las cosas, la explotación alcanzará este año las 45 madres mientras se fija el objetivo de llegar a 60. Sea como fuere, la principal meta desde que el negocio empezó su actividad siempre ha sido «ofrecer la mayor calidad posible». 

Si algo ha comprobado este joven ganadero desde que su familia dejó atrás el vacuno lácteo es que la cría de lumusina «engancha». Por desgracia, el sector ganadero continúa en horas bajas y el relevo generacional empieza a parecer una utopía. El problema, a juicio de Sainz Maza, es que la profesión «no tiene el reconocimiento que debería tener». Por eso, cree que «con un poco de ayuda las cosas irían mejor». 

Dispuesto a no rendirse mientras muchos bajan la persiana por jubilación o por desesperación, este joven ganadero burgalés seguirá peleando a pie de campo por la mejora genética de su cabaña. Además, avanza su intención de acudir al Concurso Nacional de Limusina que se celebrará el próximo mes de septiembre en la Feria del Sector Agropecuario Salamanq. 

De cara al futuro, a saber con lo que nos encontramos. Aún con todo, Sainz Maza lo encara con optimismo pero sin confiarse, siempre paso a paso y con los pies en el suelo. Su principal baza, de ahí que anime a otros ganaderos a apostar por la limusina, es que se trata de «la raza que más se está expandiendo tanto a nivel nacional como mundial». 

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