Un punto más para el granero

El buen sabor de boca del Parquesol Patatas Meléndez de la primera jornada (victoria en Gijón) tuvo prolongación en la segunda con un empate sin goles contra el siempre rocoso Eibar. Un punto que sirve para mantenerse en la zona alta de la clasificación.

Un empate que bien pudo ser una victoria si las de Borja Jiménez hubieran aprovechado alguna de las claras ocasiones de las que disfrutaron. El equipo armero llevaba el mando, pero eran las vallisoletanas las que disfrutaban de las mejores oportunidades. La más clara en la primera parte con un cabezazo de Iria que se estrelló en el larguero. Una primera escena donde se demostró la igualdad entre los dos equipos.

En la segunda mitad, la lluvia se convirtió en el protagonista. Podría pensarse que las vascas se adaptarían mejor, sin embargo, las chicas del Parquesol saben manejarse en todas las situaciones. Casi al final, llegaron dos buenas oportunidades gracias al talento de Sandra Calvo y Yarima. En la más clara Nata no llegó a batir a la meta Malena. Jiménez no dudó en sacar del campo a dos buques insignia como Charle y Ali Rey, haciendo ver que jugar en este Parquesol nadie lo tiene asegurado. Pese a ello, las sensaciones de este equipo volvieron a ser muy buenas. Una mejoría muy clara en defensa, y una actividad peligrosa en ataque. También muy buenas expectativas en portería donde Lucía apareció en los momentos claves del choque.

De momento un estreno muy positivo y que confirma las buenas sensaciones que arrastra este Parquesol desde el pasado verano. Un bloque que se conoce a la perfección y que sabe en todo momento lo que tiene que hacer sobre el campo. La siguiente prueba será el domingo a las 12.00 horas contra el Zaragoza y donde las de Jiménez intentarán volver a sorprender a domicilio.