Diario de Valladolid

Regreso al futuro

Íscar vuelve a jugar de adivino del mañana con su Torneo Internacional cadete por el que han pasado años atrás siendo ‘niños’ Ricky Rubio, Marc Gasol, Rudy Fernández, Claver...

La corporación municipal de Íscar posan con el presidente de la Territorial Carlos Sainz, Fernando Romay y las selecciones españolas U-15 y U-16.-E. M.

La corporación municipal de Íscar posan con el presidente de la Territorial Carlos Sainz, Fernando Romay y las selecciones españolas U-15 y U-16.-E. M.

Publicado por
Guillermo Velasco
Valladolid

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Un año más los habitantes de Íscar podrán decir un día «yo estuve allí y pude ejercer de privilegiado visionario del futuro». El XXIITorneo Internacional cadete ‘Villa de Íscar’, que arranca mañana con España, Italia, Rusia y Castilla y León como contendientes, obliga año tras año (y ya van 22), casi sin querer, a jugar a hechicero del mañana y vaticinar qué jugadores de los que pasarán los días 6, 7 y 8 de diciembre por su escaparate, serán en un futuro próximo estrellas de la ACB, de la Euroliga o incluso de la mismísima NBA. Porque como decía Aristóteles, ‘Saber es acordarse’ y por este torneo con vitola de Campeonato de Europa oficioso (al menos años atrás antes de que la crisis económica golpeara, no derribara, los cimientos de este Torneo), han pasado jugadores de la talla de Fernando San Emeterio, Rodrigo San Miguel, Saúl Blanco, Xavi Rey, Víctor Claver, Jaime Fernández o Rudy Fernández, hoy estrellas de la ACB o hilando más fino, a estrellas del firmamento de la NBA como Ricky Rubio y Marc Gasol. Porque sí, Marc Gasol y Ricky Rubio estuvieron en Íscar siendo niños (entre comillas, cuanto menos por la altura), niños de apenas 16 años en la selección española U16.

El Torneo de Íscar supone retrotraerse de forma obligada al pasado. Este espectacular ‘Regreso al futuro’ deja al Torneo de Íscar en una posición envidiable, en un inmejorable banco de pruebas para la selección española cadete de cara al Campeonato de Europa en el que se ha logrado colgarse nueve medallas en los últimos 14 años, la última de color de plata en el Europeo de Novi Sad el verano pasado.

A buen seguro ayer Fernando Romay, invitado de lujo en la presentación del Torneo y uno de los grandes románticos de aquel baloncesto también brillante e incluso heroico de los años 80, estaba pensando qué hubiera pasado si siendo un niño de 16 años, como los que cuentan los jugadores de los participantes de este torneo, hubiera podido tener un torneo de preparación del de la talla de Íscar, escaparate de Europa.

Jugando a ese ‘Regreso al futuro’ ¿se imaginan en el año 1975 a Romay siendo un jugador cadete? En aquella España U16 estarían entre otros los también recordados por los siglos de los siglos, Epi, Iturriaga, José Luis Llorente, Solozabal, Indio Díaz y posiblemente Chicho Sibilio con un año menos. ¿Se imaginan? La bendita generación del 59 al poder.

Pero este privilegiado banco de pruebas también lo es para la selección de Castilla y León, el gran convidado de piedra en sus a priori duelos desiguales ante España, Italia y Rusia, que con este torneo preparará su asalto al Campeonato de España de selecciones autonómicas del próximo mes de enero en el que buscará recuperar la primera categoría.

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