Balonmano
Sufrimiento antes del triunfo
El BM Atlético Valladolid tuvo que esperar en Vigo a la segunda mitad para noquear al colista pero aguerrido Academia Octavio / La aportación de Nico y Lorasque en los seis metros, determinante
El vallisoletano Dani Pérez lanza desde el extremo ante el portero del Academia Octavio Jorge García Lloria.-Photo-deporte
No fue un paseo para el Atlético Valladolid su victoria (23-27) ante el colista de la competición, Academia Octavio. Los vigueses pusieron en muchos problemas a los de Nacho González, que sufrieron para imponerse en su visita al último clasificado. Solo en la recta final, los vallisoletanos lograron tomar una ventaja mínima, pero suficiente para ganar.
El Atlético Valladolid tuvo que sufrir mucho para imponerse al Academia Octavio. El 0-3 inicial fue una ilusión ya que los vallisoletanos se durmieron en defensa y se vieron superados por los gallegos en la primera parte. Ese bajón defensivo, unido a la gran actuación del portero vigués, Jorge García Lloria, y los errores en lanzamientos claros provocaron que Academia Octavio dominara hasta el descanso (12-12).
El empate al descanso (12-12) reflejaba perfectamente esa igualdad que sorprendió al Atlético Valladolid, poco acertado en los primeros 30 minutos. Tampoco aprovecharon los de Nacho González las tres superioridades que tuvieron en esta primera mitad e incluso Fernando Hernández, el capitán del Atlético Valladolid, se quedó sin anotar en esta primera mitad en la que los pucelanos no pudieron desarrollar su mejor juego en ataque ni tampoco estuvieron cómodos en defensa.
Recuperó el pulso, el Atlético Valladolid en el arranque de la segunda parte. Tres paradas de César Pérez, al que Nacho González puso en la portería durante toda la segunda mitad, y alguna acción defensiva acertada permitieron a los pucelanos recuperar la ventaja de 3 goles (13-16, minuto 34) en un inicio muy loco, con muchos goles.
Sin embargo, el Academia Octavio no se rindió y siguió manteniendo su acierto ofensivo y frenando a los a los vallisoletanos, sobre todo gracias a la espectacular actuación del guardameta Jorge García Lloria. Pese a todo, los de Nacho González continuaron dominando el marcador con uno o dos goles de ventaja (17-19 y 22-24) cuando el encuentro entró ya en una fase de mucho más control, más defensa y un ritmo mucho más pausado.
Una parada de César Pérez y un gol de Lorasque terminaron por cerrar el partido y la laboriosa victoria vallisoletana en Vigo (23-27).