Rueda pide tiempo muerto

Fue un discurso mucho más amable de lo que puede parecer por escrito. No hubo tono de enfado sino de complicidad. Rueda ejerció de capitán y verbalizó un pensamiento de la plantilla... o buscó una forma de sacudirle la presión. Porque, con su experiencia, no es tan iluso como para negar la evidencia.

«Estáis enfatizando mucho en la falta de gol. No me gusta que estéis todo el día ‘falta gol, falta gol, falta gol’. Al final nos vamos a creer que falta gol. Llevamos pocos, pero también nos han encajado pocos», indicó tras el primer comentario sobre la escasa capacidad realizadora pucelana.

«El vestuario no ve tan grave este problema. Está muy tranquilo porque el gol llegará. No tenemos el pensamiento que se percibe desde fuera. Tanto hablar de la falta de gol nos llega a cansar un poco, la verdad», agregó Rueda, que no metió el bisturí hasta el fondo.

«El equipo ha entrado en un bache porque ha entrado. Todos los equipos lo tienen. Ojalá la última victoria sea un punto de inflexión, volvamos arriba y hayamos pasado esa pequeña crisis».

El pacense no ve la profusión goleadora como elemento imprescindible para el ascenso. «La Segunda está muy igualada y, si llevamos tres meses con la falta de gol, desde que se lesionó Roger, a lo mejor ascendemos metiendo 30 goles. Porque mientras estemos bien defensivamente y no nos hagan ocasiones, arriba hay gente de calidad que tarde o temprano la va a sacar. Estar todos los días con lo de que ‘falta gol’ no nos beneficia».

Sin embargo, no es ningún secreto que los equipos que suben tienen una buena media goleadora. Rueda también cuenta con un antídoto para esta reflexión. «Mientras saquemos los partidos y vayamos haciendo puntos, si tenemos que subir con la media más pequeña de todos los que han subido, me da igual 30 que 80. Si subes, los goles no los vas a ver».

Pero el central tampoco obvia la lógica. «Sí es cierto que marcar te ayuda a ganar mejor. No es lo mismo ganar 2-0 o 3-0 que ir 1-0 raspado todos los partidos. Pero son tres puntos igual».

El capitán lució sus galones para reivindicar a sus compañeros. «Falta un delantero porque se ha lesionado otro, no porque falte gol. Este equipo tiene mucha experiencia y lo está demostrando sobreponiéndose a las lesiones».

En el plano personal, ya se ve listo para jugar tras su lesión. «He entrenado con el equipo hoy, y dos días la semana pasada. Me encuentro bien. Si Alberto me da el alta y me dice que estoy para entrenar, lo hago al cien por cien. Si vuelvo a romperme, mala suerte».

Herrero y Samuel se lo han puesto difícil tanto a él como a Valiente en el eje de la zaga. «Están bien. El otro día hicieron un buen partido. El equipo está volviendo a tener solidez defensiva. No sólo la defensa, sino todos. Es por donde se empieza otra vez a mejorar. Porque lo de arriba, ya llegará».

Parte de la afición se acordó de él hasta la victoria contra el Recreativo. Desde que lesionó, el equipo no ganaba. «La gente se acuerda de los que no están. Luego, cuando están, les echan la culpa. Es algo anecdótico».

El domingo espera un Osasuna en crisis. «En su casa es un equipo difícil y allí se juega poco. La gente le apoya pero hay que llevar el partido a nuestro terreno porque se le puede echar encima. Hay que igualarlos en intensidad».