Miguel Delibes y Mario Vargas Llosa, una historia de "respeto y admiración mutua"
La fundación que custodia el legado del escritor vallisoletano recuerda la relación que mantuvieron ambos escritores

Mario Vargas Llosa saluda a Miguel Delibes
Tras la muerte del escritor Mario Vargas Llosa, Premio Nobel de Literatura, desde la Fundación Miguel Delibes ha subrayado que ambos autores se profesaron "respeto y admiración mutua", y como prueba de ello han difundido a través de su cuenta en la red social X una imagen de ambos y la carta que el 26 de abril de 1994 le remitió el peruano al vallisoletano, con motivo de la concesión del Premio Cervantes a Delibes.

uNA IMAGEN DE LA CARTA
En el escrito, Vargas Llosa agradecía a Delibes la bienvenida como nuevo académico de la lengua, y escribía: “Una de las ilusiones que tengo es tener la oportunidad de verlo y charlar con usted. No hemos tenido ocasión casi de hacerlo hasta ahora y por eso no he podido decirle lo mucho que he leído y el respeto y la admiración que siento por su obra, la novelística y también la ensayística, y por su envidiable estilo, que mantiene viva y actual la mejor prosa española”, informa Ical.
En un entrevista concedida en 1970 por el escritor vallisoletano para el volumen de Fernando Tola de Habich y Patricia Grieve Los españoles y el boom, que publicó Tiempo Nuevo, Delibes expresó lo siguiente en relación al narrador peruano: "La ciudad y los perros, sin duda. Me impresionó. También me parece impecable Los cachorros; La casa verde me parece más confusa; Conversación en La Catedral, que he leído fragmentariamente, más artificial. El tema de La ciudad y los perros, además, tiene validez para todos. Ese ambiente cuartelero, esa lucha por mantener el buen nombre de la institución a costa de lo que sea, vale para Europa o para América o para Oceanía. Los hombres somos ruines en todas partes y nuestra organización, defectuosa, en todas partes también. Otra aportación valiosa de Vargas Llosa -aparte [del] enfoque, construcción y ruptura del tiempo novelesco- es la de facilitar al lector pistas para que colabore en la creación de la novela. Es decir que, en cierto modo, Vargas opera un poco como los viejos autores de novelas de misterio, pero más sutilmente. Y esta es otra razón por la que prefiero La ciudad y los perros. Aquí las pistas me llevaron a una rápida identificación de los personajes que se mueven en dos planos paralelos sometidos a cronología distinta".