Diario de Valladolid

EXPOSICIÓN con ‘fotógrafos españoles de los años 50 y 60’ acoge fondos de foto colectania

El MPH, ‘hacia la modernidad’ con el legado de San Benito

Reúne obras de maestros como Català-Roca, Masats, Colom, Miserachs, Sanz Lobato o Maspons

Una mujer contempla la fotografía de Fernando Gordillo ‘Vaquero bailando con una señora’, de los años sesenta.-PABLO REQUEJO

Una mujer contempla la fotografía de Fernando Gordillo ‘Vaquero bailando con una señora’, de los años sesenta.-PABLO REQUEJO

Publicado por
Julio Tovar
Valladolid

Creado:

Actualizado:

El Museo Patio Herreriano sigue construyendo pilares sobre los que asentar su ‘reedificación’. A punto de firmarse el comodato de cesión de la Colección Arte Contemporáneo –la concejala de Cultura confirmó ayer que el acuerdo es «del 99%», a falta de unos «flecos», para mantener «todos los fondos» en Valladolid, independientemente «de los cambios de legislatura»–, el MPH estrenó este jueves la exposición Hacia la modernidad. Fotógrafos españoles de los años 50 y 60, una muestra que se nutre de los fondos de la Fundación Foto Colectania, vieja conocida de la emblemática sala municipal de San Benito, un referente nacional por su histórica atención a la fotografía que a partir de marzo cerrará sus puertas para «servir a la cultura desde otra perspectiva», en palabras de Ana Redondo.

El MPH asume desde ahora el legado del espacio vallisoletano. Comienza abriendo sus puertas de su Sala 2 a más de un centenar de imágenes de maestros como Francesc Català-Roca, Nicolás Muller, Ramón Masats, Joan Colom, Xavier Miserachs, Fernando Gordillo, Oriol Maspons, Gabriel Cualladó, Rafael Sanz Lobato o Carlos Pérez Siquier, autores que entendieron el medio desde el «compromiso» con su época, como explicó la edil socialista durante la inauguración.

«La Guerra Civil supuso un corte sanguinario en todos los sentidos, también en el de la creación», advirtió Pepe Font de Mora, director de Foto Colectania, para quien los autores citados consiguieron recuperar los vínculos perdidos con las vanguardias artísticas.

Más allá del guiño al MPH que guarda Hacia la modernidad –con esas fotografías abstractas, geométricas o informalistas, de Masats o Ton Sirera; con esos retratos de Saura, Chillida o Miró–, la muestra recupera el recuerdo de aquella España de mitad de siglo, rural y urbana –como si los límites fueran tan claros en esas escenas arrabaleras de Francisco Gómez, o en la mirada de Siquier al mísero barrio almeriense de La Chanca, un testimonio de denuncia–.

Tardes de fútbol en un erial; sueños de glorias futuras con la muleta; fiestas en el campo; la mirada digna y serena de las humildes gentes del campo ante la ocasión de un retrato; las Hurdes; izas, rabizas y colipoterras; una mujer que menea una escoba en mitad de una calle aún no colapsada de coches... Estampas de una España que tardaría en salir del blanco y negro.

tracking