Las plataformas tomarán la calle frente a las «escandalosas» listas de espera

«La enfermedad iguala a todas personas, poniéndolas en la misma situación de vulnerabilidad. Nuestro modelo sanitario era una joya, que garantizaba una asistencia en condiciones dignas con independencia del lugar donde viviesen las personas; era un ejemplo en todo el mundo, tanto por su calidad como por su bajo coste y eficiencia». Con el objetivo de reconquistar uno de los pilares fundamentales del estado de bienestar, la Comunidad se echa a la calle para rescatar a su Sanidad de un «sistema caótico».

Una semana resta para que Valladolid sea testigo de una «histórica» manifestación ante la «deriva hacia la privatización a la que nos empuja la política neoliberal de la Junta». Así lo aseguraron ayer representantes de las Plataformas en Defensa de la Sanidad Pública de las nueve provincias castellanos y leonesas. En la diana de sus exigencias centraron las «escandalosas» listas de espera al considerarlas un «atentado contra la dignidad», tal y como señaló la salmantina Regina Moreiro, reprochando al consejero servirse de la «incapacidad para dar una solución al problema» como justificación a la «participación» de las empresas privadas.

«Si consideramos que los presupuestos de Sanidad son los mismos que hace diez años, lo que a efectos reales supone una disminución importante, a lo mejor encontramos una cierta relación con el incremento de las listas de espera», sentenció Moreiro, asegurando que la solución «no está en derivar a la privada» si no en «utilizar el dinero previsto para conciertos en contratar al personal necesario».

Desde el colectivo leonés, Carmen Franganillo aseguró que la región se encuentra «inversa en un proceso» que, lejos de ser consecuencia de la crisis, responde a «una contrarreforma sanitaria premeditada» que acompasa la creación de «un país a dos velocidades o niveles: lo rural frente a lo urbano y los ricos frente a la clase trabajadora».

Aunque reconoció que las cuestiones objeto de reivindicación son un factor común en toda la Comunidad, Franganillo remarcó la «problemática específica» de las zonas rurales que resultan «aun más castigadas». Algo que se traduce, como señaló, en una «dificultad añadida que aumenta su despoblación».

El proceso al que se refirió la leonesa es, a juicio de los colectivos, «una fórmula para comerciar con nuestra salud. Se recorta en personal, se externalizan servicios y se precariza el empleo a la par que se maquillan las listas de espera para cuadrar las cifras. Se deriva mientras existen plantas enteras cerradas en los hospitales».

Las Plataformas en Defensa de la Sanidad Pública compartieron un análisis por el que observan también en la política autonómica una «estrategia para privatizar el sistema público» mediante un doble fenómeno. Por un lado, la «expulsión del modelo, propiciando que las personas palien la precariedad del mismo mediante la contratación de la atención con entidades privadas», concretó el palentino Fernando Aparicio. Aspecto al que añadió «las facilidades para que se introduzcan en lo público aquellas empresas que hacen negocio con la salud». Entre los mecanismos utilizados para ello, Aparicio enumeró los conciertos para pruebas diagnósticas e intervenciones quirúrgicas, la externalización en la provisión de los servicios, las reformas organizativas de «gran calado» y los modelos de gestión público-privados.

Ejemplo de este último punto es el Hospital Universitario de Burgos, HUBU, que se basa en la concesión a una empresa privada de la construcción, equipamiento, mantenimiento, reposición y prestación de determinados servicios. «Se dijo que sería más rápido, barato y mejor, pero ninguna de estas premisas se ha cumplido», aseguró el doctor Pablo Yagüe. A su juicio, el modelo de concesión está mostrando ser «un pozo sin fondo» puesto que «lo que se dedica al desvío en la cuantía del canon es dinero que se tendría que estar invirtiendo en personal, en recursos en Atención Primaria y del medio rural así como en la reducción de las listas de espera». Con estos criterios como base, planteó la exigencia de recuperar una «gestión pública directa» para el HUBU.

Estos problemas que se convierten en «común denominador» de las nueve provincias derivan, según los colectivos, del recorte presupuestario. «Estamos al mismo nivel de financiación que estábamos en 2009. La política sanitaria de la Junta está contribuyendo a la quiebra como consecuencia de una nula y pésima planificación que da lugar a una Sanidad desigual y discriminatoria», concretó el zamorano Carlos Pedrero.

Así, las plataformas sanitarias, respaldadas por los sindicatos regionales, tomarán el próximo sábado las calles de la ciudad del Pisuerga para hacer frente a una «ofensiva privatizadora» que está determinando un «deterioro brutal» del sistema público «hasta poner en riesgo su supervivencia», aseveró el vallisoletano Luis Ocampo, quien concluyó su intervención advirtiendo de que «los dirigentes de la Consejería, con su titular a la cabeza se están entregando con especial entusiasmo» a la tarea de «machacar la Sanidad pública para que la ‘antisalud’ privada tenga posibilidades de crecimiento».

El psoe acudirá de forma «masiva» a la movilización por la sanidad pública

El secretario general del PSOE de Castilla y León, Luis Tudanca, confirmó ayer que su formación acudirá de forma «masiva» a la manifestación convocada por las Plataformas en Defensa de la Sanidad Pública el próximo día 20 en Valladolid.

Tudanca insistió en que su partido apoya esta convocatoria y reiteró que el PSOE «siempre ha estado en las grandes batallas por la Sanidad». En este sentido, recalcó que los socialistas burgaleses «han sido un ejemplo» en esa lucha con su trabajo para tratar de recuperar el Hospital Universitario de Burgos (HUBU) a favor de la Sanidad pública y confió en que «miles y miles» de castellanos y leoneses se den cita en la ciudad del Pisuerga en una semana. Asimismo, tachó de «falta de respeto absoluta» la calificación de la manifestación como «acto preelectoral» por parte de Raúl de la Hoz.

SATSE denuncia la saturación por la gripe de las urgencias en Segovia

El sindicato de enfermeros Satse denunció ayer la «recurrente» falta de previsión de las comunidades autónomas ante el incremento de la presión asistencial por la incidencia de la gripe, que está causando como cada año colapso y saturación en los servicios de Urgencias de prácticamente todo el país, entre los que destacó las del Complejo Asistencial de Segovia.

Esta situación, según criticó la organización sindical, hace que los profesionales sanitarios estén «absolutamente desbordados», mientras que en los centros hay «pacientes en camillas y sillas de ruedas por los pasillos, esperas de resultados superiores a las 48 horas, espacios sin cortinas ni biombos que ofrezcan cierta intimidad». Por ello, pidió a los responsables sanitarios que dejen de lado intereses puramente económicos y prioricen una óptima atención.