Sucesos
Tres detenidos en Valladolid por insultar a un mendigo que salió corriendo detrás de ellos con un cuchillo y acabó arrestado
Los tres y un menor que ha sido identificado, profirieron insultos como "mendigo de mierda, te vamos a matar" contra el sin techo que dormía en un banco de la calle Estadio
Agentes del Cuerpo Nacional de Policía en una imagen de archivo.
Funcionarios de la Policía Nacional detuvieron en la madrugada del domingo en Valladolid a tres varones como presuntos autores de un delito de odio y amenazas graves, y a un cuarto varón por un delito de amenazas graves.
Agentes en servicio de Seguridad Ciudadana en vehículos uniformados eran comisionados en la madrugada del 13 de abril para que acudieran a la calle Estadio donde, según la llamada de un requirente, se estaba produciendo una reyerta y podría haber cuchillos.
Los agentes, a su llegada, observaron a cuatro personas corriendo de manera disgregada y un quinto varón que, al darle el alto, arrojaba algo debajo de un coche. Poco después se comprobó el objeto lanzado al suelo era un cuchillo de 25 centímetros de longitud, 12 doce de ellos de hoja.
Otro indicativo policial que se presentó en el lugar consiguió reunir a los cuatro individuos que habían salido corriendo y manifestaron que el varón que tenía el cuchillo les había amenazado con clavárselo.
El sin techo que había arrojado el arma blanca manifestó que cuando se encontraba durmiendo en un banco cercano, cuatro jóvenes se le habían acercado profiriendo insultos y amenazas tales como “mendigo de mierda, te vamos a matar” llegando a lanzarle trozos de ladrillo y botellas.
Los agentes realizaban las comprobaciones oportunas para determinar la autoría de los hechos, resultando los tres jóvenes detenidos como presuntos autores de un delito de odio y amenazas graves y el varón víctima de este primer delito, como presunto autor de un delito de amenazas graves.
El cuarto varón aún no ha cumplido la edad mínima por la que de acuerdo con la legislación vigente se le exigiría la responsabilidad penal acorde a los hechos presuntamente perpetrados, por lo que se le identifica y se traslada a dependencias policiales con el fin de hacer entrega de él a sus progenitores. Los detenidos pasaron a disposición de la autoridad judicial que, tras la declaración, decretó su libertad.