Puente culpa ahora al PP de que Inobat y Switch no lleguen a Valladolid

El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, criticó este sábado al Partido Popular y a un un gobierno autonómico "acomodado, adormecido que deja pasar oportunidades y, a veces, las rechaza". Así, Puente puso como ejemplo el trabajo que realizó como alcalde del Ayuntamiento de Valladolid para que empresas como Inobat y Switch Mobility se instalaran en la capital vallisoletana. "Uno de estos proyectos está prácticamente olvidado y el otro en serio riesgo", ha lamentado Puente, quien ha considerado que esta situación es consecuencia de la "atonía absoluta" del Gobierno regional.

Así, ha desvelado una reunión que mantuvo con una directiva de Inobat y el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco. "En medio de la conversación el presidente paró la reunión y dijo: 'Me quedo alucinado de lo bien que hablas ingles'. Le importa un pimiento lo que pasa aquí, pensé yo", ha explicado.

De esta forma, Puente responsabiliza ahora a la Junta de que Switch e Inobat finalmente no se vayan a instalar en Valladolid, a pesar de que durante su etapa como alcalde la primera de estas empresas únicamente adquiriera los terrenos donde se habría instalado su fábrica de autobuses eléctricos, y la segunda no realizó ningún movimiento más allá de algunas reuniones con las instituciones.

Puente ha explicado durante su intervención que al PP la "mediocridad vale" y al PSOE se le exige la "excelencia". "Cuando la mediocridad sirve, es difícil que haya estímulos, lo primero que le tenemos que transmitir a la ciudadanía de Castilla y León es que no podemos seguir instalados en la mediocridad, que no podemos seguir instalados en el conformismo y que los problemas no vienen de fuera, ni nos los van a resolver desde fuera, tendremos que resolverlos nosotros", ha zanjado.

En otro orden de cosas, el ministro de Transportes negó que haya habido “favoritismo” con el proyecto de la nueva estación de trenes de Valladolid-Campo Grande, más allá de la “estética” que señaló ha mejorado en este último año. “Que guste, lo entiendo; que cause envidia, lo puedo entender también”, dijo para añadir que “cuando es sana no es mala”.

En una declaraciones a los medios, antes de participar en un ágora del XV Congreso Autonómico del PSOE de Castilla y León, Puente ironizó con que “al que más le ha enfadado la estación curiosamente es al alcalde”, dijo, en referencia al regidor de Valladolid, Jesús Julio Carnero, que recordó contrató con “dinero público” a un bufete de abogados en el mes de agosto para “oponerse” a esta inversión de 253 millones de euros (sin IVA), informa Ical.

Asimismo, el ministro de Transportes aseguró que no enviará el proyecto completo al alcalde de Valladolid como le pidió este lunes por carta porque no pueden facilitar esta documentación a nadie antes de que se licite la obra, porque podría tener acceso a ella algún “amigo” constructor antes de que se inicie el concurso público. Esto, dijo, lo conoce el alcalde de Valladolid, por lo que aseguró que la misiva y esta nueva política “no tiene ningún sentido”.

Por tanto, Puente apuntó que el Consejo de Administración del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) Alta Velocidad aprobará la licitación a finales de febrero. Además, señaló que esta obra no detrae recursos de ningún otro territorio y recordó que el proyecto se licitó en 2019, por lo que lleva seis años redactándose, por lo que él se ha encargado de esta actuación este último año. En este tiempo, dijo, se ha encargado de la “estética” y del “envoltorio”, porque la anterior propuesta le parecía “fea” y sin “ninguna singularidad”.

Finalmente, el ministro defendió que la dimensión e inversión de la estación está justificada por la previsión de viajeros de Valladolid, que podría registrar hasta cinco millones al año. “Lo queramos o no”, dijo, Valladolid va a ser un “nodo de comunicaciones ferroviarias en la Comunidad”, porque canalizará los tráficos de Galicia, Cantabria, Asturias, de la ‘Y’ vasca, y también del sur y del este.

El ministro también afirmó este sábado que no es el momento "de hablar del soterramiento en Palencia”. De esta manera, aseguró que la obra que se está llevando a cabo en la ciudad de la alta velocidad entre Palencia y Cantabria “nada tiene que ver con el soterramiento”.

En ese sentido, afirmó que “su compromiso es con la racionalidad” y aseguró que en España existen protocolos firmados para realizar soterramientos en múltiples lugares por importe de unos 40.000 millones de euros, aunque el ministro reconoció que es algo inviable. “Si alguien me dice de dónde se saca ese dinero yo estoy encantado de comprometerme”, afirmó. “La realidad es que no se va a hacer en Valladolid, desde luego dudo que se vaya a hacer en Palencia, no se va a hacer en Villarreal, no se hará en Talavera de la Reina o Granada, es decir, había protocolos firmados y no se va a hacer porque no hay recursos económicos suficientes. Firmar protocolos es muy fácil, pero luego hay que licitar proyectos y hacer las obras”.

En cuanto a la paralización de los trabajos nocturnos en las obras que Adif estaba llevando a cabo en el Camino Viejo de Husillos, el ministro aseguró que “se están teniendo muchas dificultades a la salida de Palencia para continuar con la obra” y que no tenía sentido “entorpecer el curso de las mismas y poner en riesgo que estas puedan ser financiadas con cargo a fondos europeos”.

Precisamente, sobre las molestias que esos trabajos nocturnos podrían ocasionar a los vecinos de las zonas afectadas, el ministro aseguró que “son las menos posibles” y reconoció que existían dos opciones ”trabajar unos días durante la noche y acabar en poco tiempo o no hacerlo y aumentar el tiempo de la obra. Espero que impere el sentido común y podamos continuar”, señaló Puente, que pidió colaboración a los vecinos, porque "muy pocas obras se pueden hacer sin molestar a nadie”, argumentó.

Finalmente, Puente afirmó que se está llevando el soterramiento a los lugares donde esta sea la mejor solución y tengan viabilidad económica. “El soterramiento difícilmente es la mejor solución, desde luego económicamente”.

El PP quiere despoblación

El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible también ha culpado al PP de querer despoblación para favorecer así que los jóvenes abandonen Castilla y León y evitar "inquietudes" y ha culpado al Gobierno autonómico de instalar la Comunidad en la "mediocridad" y el "conformismo".

Así se ha pronunciado Puente durante su intervención donde ha insistido en la idea de que para el PP es favorable que haya despoblación porque "cuanta más gente joven se marcha, más gente con inquietudes se marcha".

Durante su intervención en el Ágora 'Derecho a Quedarse' celebrada en el Congreso, el ministro ha defendido el liderazgo del que será elegido en este 'cónclave' secretario autonómico del PSOE, Carlos Martínez. "Eres un ganador, tienes la mejor escuela que es el municipalismo y una contratada gestión, nadie puede decir que no puedes gestionar si en tu tierra te apoya la mayoría absoluta", ha defendido Puente, quien ha considerado que Carlos Martínez es "la persona adecuada en el momento adecuado".

Puente ha analizado el problema de la despoblación en la Comunidad y ha asegurado que no es una cuestión "sencilla" de resolver. "Si queremos tener futuro conseguir que la gente se quede aquí", ha garantizado, tras lo que ha incidido en que "el gobierno de la derecha quiere que suceda lo que sucede".

Así, Óscar Puente ha defendido que son los migrantes los que ayudan a "sujetar un poco el edificio" pese a la "demonización" por parte de determinados partidos. "No es fácil resolver problemas hay gente que tiene recetas mágicas y las soluciones no son fáciles, hay que luchar contra la dinámica de los tiempos", ha señalado en declaraciones recogidas por Europa Press.

Para el ministro de Transportes "la batalla no va a ser fácil" pero ha sido contundente al defender que la única manera de la que no se solucionan los problemas es "seguir como en los últimos 30 años, con un gobierno acomodado, adormecido que deja pasar oportunidades y, a veces, las rechaza".