Banderas defiende en Valladolid al teatro como "espacio y refugio para la verdad"

Directo desde Málaga, tras cerrar una nueva temporada a los mandos de la dirección del musical Gypsy, Antonio Banderas aterrizó en Valladolid para recibir la Medalla de Oro como propietario del Teatro del Soho. "Un premio especial", dijo antes de recibir el galardón que, si bien recaerá en sus manos, dedicó a todo el equipo que hay detrás. "No es para mí, es para todo el proyecto donde estamos involucrados con un montón de gente", expresó.

La aparición de Banderas fue de las más esperadas dentro y fuera del Teatro Calderón, que acoge por primera vez la entrega de Medallas de Oro y Distinciones de Honor de la Academia de las Artes Escénicas. Desde fans, compañeros de profesión y hasta políticos no se perdieron cada paso del malagueño. Pero sí podría haber sido recibido en Valladolid por su trabajo como actor, esta vez no fue así ya que lo hizo como impulsor del Teatro-Cine Alameda, hoy convertido en Teatro del Soho y por el que recibe una Medalla de Oro.

"Es un premio especial porque llevamos ya cinco años trabajando", dijo Banderas ante los medios de comunicación. Un premio que, no obstante, no consideró "inesperado" pero sí "muy complicado", pese a los destacados datos de asistencia que nombró con "llenos" en los últimos cuatro meses. "Y eso se cierra hoy con un premio que no es para mí, que es para todo el proyecto", agradeció sin olvidarse de su equipo, a lo que añadió que es "muy satisfactorio" recibir este galardón y ayuda "a creer en lo que estamos haciendo".

Por otro lado, el acto tuvo una reflexión sobre los actuales tiempos en los que "ya no sabemos" distinguir entre la verdad y la mentira. "El teatro es un espacio y un refugio para la verdad. No ya por los contenidos de los autores hagan y traten de expresar, pero sí por las formas", explicó. En esta línea, se refirió a Gypsy, el musical que dirige, y aseveró que la música de toda la función es en directo y eluden hacerla con pregrabados. "Esa es nuestra verdad. Yo creo que los escenarios y el teatro, mientras más avance las tecnología y la inteligencia artificial, más se revalorizarán, ya que la gente está ansiosa por saber qué es verdad".

Cayetana Guillén-Cuervo y su regreso a Valladolid

No pudo faltar a la cita la presidenta de la Academia de las Artes Escénicas, Cayetana Guillén-Cuervo, que elevó al Calderón como "uno de los grandes teatros de España". Unas palabras a las que añadió fragmentos de su pasado, al recordar las "horas" recorridas en los camerinos porque sus padres trabajaban en el teatro vallisoletano. "Es un orgullo", consideró al respecto, antes de elevar a Valladolid como "ciudad muy curtida en las artes escénicas".

"Espero que vaya todo bien", dijo antes de dar comienzo la gala del X aniversario de entrega de galardones, "porque realmente todos los que trabajamos de manera altruista en esta academia lo hacemos con la intención de dignificar, buscar el respeto para todos nuestros profesionales y trabajar colaborativamente con las instituciones, en los despachos, consiguiendo cosas. Ahí es donde se consiguen y estamos trabajando muy duro".