Los parkibicis solo registran un 10% de ocupación tras seis meses en servicio
La ocupación media de los doce aparcamientos para bicicletas diseminados por la ciudad sólo llega a 26 plazas de las 266 totales, con el situado en Parquesol que continúa vacío medio año después de ponerse en servicio
Parkibici en Parquesol. PHOTOGENIC
Seis meses después de que se estrenasen los parkibicis en Valladolid, continúan prácticamente sin uso, continúan vacíos, con apenas un 10% de su ocupación. Si un ciudadano quiere guardar su bicicleta en alguno de estos 12 garajes distribuidos por toda la ciudad, a buen seguro que no tendrá problemas de ocupación para depositar su vehículo personal porque la mayoría de las plazas están vacías. Así lo refleja un estudio pormenorizado realizado por este periódico a través de la propia aplicación de Parkibici que ofrece en tiempo real las plazas ocupadas en cada uno de estos mamotretos.
Un experimento que se estrenó el 13 de enero y seis meses después se ha visto como el resultado no ha sido el esperado, como sí lo sido el nuevo sistema de alquiler de bicicletas municipal Biki . De hecho, la anterior corporación municipal se vio obligada a trasladar la instalación de la plaza Juan Pablo II en Villa del Prado por su escaso uso a las proximidades de la facultad de Filosofía y Letras.
Este diario ya realizó dos estudios iguales en abril y mayo y los resultados han sido similares: el uso de los aparcabicis es escaso. Las escasas cifras, apenas un alcanzan una ocupación media del 10,8% en este último análisis, no justifican la inversión realizada de 1,3 millones de euros. Un montante de dinero que dejó el ex gerente de Auvasa, Álvaro Fernández Heredia, a las arcas públicas de Valladolid antes de unirse a la lista de Más Madrid para las elecciones municipales del pasado 28 de junio.
El estudio comprendió desde el jueves 6 hasta el domingo 9 de julio, ambos incluidos. La ocupación media de estos cuatro días es del 10,2%, es decir, unas 26 plazas ocupadas de media al mismo tiempo cuando las totales disponibles alcanzan las 266. Unas cifras muy bajas para la inversión realizada. El primer día de este estudio fue el que peores resultados de ocupación tuvo, un 9% de media, despúes la dinámica ha sido ascendente. El viernes 7 se llegó hasta el 10,3% (con un pico del 10,9% de ocupación a las 12.40 horas), el sábado se llegó a una ocupación media del 10,7% (alcanzando a las 17:00 horas y a las 20:00 horas el mayor porcentaje de ocupación durante este estudio: 11,3%, 30 plazas ocupadas al mismo tiempo) y el domingo hasta el 10,8%.
Una de las escenas que se repiten en los tres estudios realizados por este periódico es que el mamotreto de la plaza Marcos Fernández de Parquesol se encuentra vacío. Los vecinos de este barrio no han recogido el guante de estos garajes y esta instalación se encuentra en desuso. Tan solo muestra un único uso el sábado a las 11:00 horas , el resto de las horas estudiadas estaba vacío. Esta situación es única en toda la ciudad porque aunque el resto de artefactos tengan poco uso sí presentan alguna plaza ocupada a lo largo del día.
Los usos entre los 12 aparcabicis varían bastante. Del 6 al 9 de julio el más usado fue el de la Casa del Estudiante. De hecho, el sábado 8 registró siete plazas ocupadas durante todo el día. Las cifras más altas de todos los aparatos, pero escasas ya que apenas representan el 14% de la ocupación total porque este es el mamotreto más grande de la ciudad. En un principio, el que tenía más capacidad era el de Juan Pablo II con 62 plazas, pero tras su traslado al entorno de la Facultad de Filosofía y Letras se quedó en 38 . La siguiente instalación, en lo que a uso se refiere, es una de las que menos capacidad tiene. Se trata del garaje situado en la plaza Lola Herrera en Las Delicias. Este aparcabicis tiene capacidad para diez plazas, al igual que el de la calle Monjas, la calle Doctrinos y la plaza San Miguel; pero siempre tiene varias bicicletas instaladas y el viernes 7 llegó a alcanzar los seis vehículos instalados al mismo tiempo. Al tener capacidad para diez vehículos, supone una capacidad de ocupación del 60%, la máxima recogida en este análisis de cuatro días.
Las instalaciones, después de la de la Casa del Estudiante, que más capacidad tienen para albergar bicicletas son las de la calle Recondo y la de la facultad de Filosofía y Letras con 38 cada una. Pese a ser de las más grandes de la ciudad sus ocupaciones medias son escasa y siempre hay plazas vacías para los usuarios. En estudios anteriores el parkibici de Recondo , próximo a la estación de trenes, era de los más usados. En cambio, en este análisis es de los que menos ya que en ningún momento superó las dos bicicletas instaladas al mismo tiempo. Por su parte, el de Filosofía y Letras es el que menos tiempo lleva instalado en esta ubicación, desde el tres de mayo, ya que es el mamotreto que se quitó de la plaza Juan Pablo II. Con el traslado, se redujeron su plazas hasta las 38, cuando antes tenía 62. Antes del cambio de ubicación este mamotreto tenía el mismo uso que el de Parquesol: ninguno. Vecinos del barrio señalaban que la mayoría de casas tenían trasteros y lugares donde poder guardar sus bicicletas, por ellos pidieron que se retirara de la plaza. Ahora su uso se ha visto incrementado, pero lejos quedan las 38 plazas totales de las que disponen. Las bicicletas que se alojan en su interior apenas alcanzan las tres o cuatro al mismo tiempo, lo cual supone un porcentaje del 10% .
Por su parte, la instalación de la calle Gabilondo (próxima a la estación de autobuses) es de las que tiene 20 plazas, junto a la de la plaza del Antiguo Mercado, la calle San Luis, Cardenal Cisneros y el de Parquesol. Su uso a lo largo de los cuatro días del estudio ha sido bajo, casi mínimo, pues apenas llegó a tener dos bicis aparcadas al unísono. Unas cifras, una vez más, bajas para la capacidad que tiene. Situación similar ocurre en la plaza del Antiguo Mercado, de la veintena de plazas disponibles apenas se llegó a alcanzar en dos ocasiones las tres bicicletas estacionadas. En la calle San Luis la historia se repite, el máximo de ocupación se alcanzó el sábado a las 11.00 horas con cuatro bicicletas, mientras que en el resto de horas consultadas las plazas ocupadas son dos. El de Cardenal Cisneros cuenta con datos parecidos, la mayoría de veces tiene dos o tres bicis en su interior, con la mayoría del espacio libre.