La plaza Mayor de Valladolid dice adiós al tiovivo

El Tiovivo 1900 abandona Valladolid hasta las próximas navidades . El carrusel de dos pisos, que protagonizan caballitos junto a otros animales y algunos vehículos, finaliza en los primeros días de marzo su servicio en la ciudad tras casi cinco meses haciendo las delicias de niños y no tan niños.

El tiovivo, que reina en la plaza Mayor de Valladolid desde hace 20 años, comenzó a funcionar el 24 de noviembre de 2022 y, en teoría, debía haber acabado su actividad el 6 de enero, pero las numerosas visitas han prolongado su estancia en el centro de la ciudad, mientras el resto de iniciativas navideñas abandonaban el emplazamiento hasta las siguientes navidades. 

El carrusel, que evoca estas antiguas atracciones de 1900, pertenece a la familia Ortega desde hace varias generaciones. La empresa Carruseles Ortega importó esta atracción de Estados Unidos en 1932 de mano de Luis Ortega , un apasionado de los carruseles que se encargaba de pintarlos y restaurarlos en caso de que les pasase algo. Hoy en día,  es su nieto Juan Carlos Clemente quien ha tomado las riendas del negocio familiar y se encarga de gestionar el tiovivo. 

El Tiovivo 1900 espera volver en noviembre a la plaza Mayor de Valladolid y seguir con la tradición de la familia Ortega, mientras brinda a los más pequeños un paseo a lomos de sus caballitos.