El cierre del centro de Valladolid al tráfico, en el aire
El Ayuntamiento anunció el corte de la circulación por la almendra central hasta el domingo, pero el viento rebajó durante la tarde los niveles de ozono y será este viernes a las ocho de la mañana cuando se tome la decisión
La decisión estaba tomada, pero el viento que empezó a soplar, y que ya en las mediciones de la tarde redujo los niveles de contaminación por ozono, podría evitar el cierre del centro de Valladolid al tráfico , una medida que adoptó por la mañana el Ayuntamiento y que se daba por segura . La decisión sobre el cierre se tomará este viernes y de aplicarse tendrá vigencia desde las 9.00 hasta las 21.00. La previsión inicial era mantener la restricción del tráfico al centro hasta el domingo, después de superarse en las tres últimas jornadas los niveles de ozono permitidos el plan de emergencia por contaminación del aire del Ayuntamiento.
Hay que remontarse al 1 septiembre de 2019 para recordar la última vez que se suprimió el tráfico por el centro de la ciudad al superarse los 120 µg/m3 de ozono, un cierre que sólo se mantuvo un día. A diferencia de entonces, el episodio de contaminación que vive ahora la ciudad tiene visos de ser más duradero y de más intensidad, impulsado por unas temperaturas excepcionales incluso en julio.
La concejala de Medio Ambiente, María Sánchez, dijo, como prueba de lo serio de la situación, que en la estación de medición de la calle Vega Sicilia se han llegado a alcanzar valores de 170 µg/m3 de ozono el miércoles día 13 , muy por encima del nivel permitido, mientras en la ubicada en el entorno de Michelín se llegó a 163 y a 157 en la del puente del Poniente.
El propio alcalde, Óscar Puente, se hizo eco a través de su cuenta de twitter, antes de que se replanteara la decisión sobre el cierre, de la «enorme gravedad» de la situación y pidió a los ciudadanos respetar las recomendaciones porque «no es ninguna broma», señalaba en su mensaje.
El episodio que podría derivar en el corte del centro de la ciudad al tráfico empezó el día 11 al activarse la situación 1, la preventiva, que conlleva la adopción de medidas de información a los ciudadanos. La ola de calor inusual que se vive desde hace días y que se prolongará, al menos, hasta el domingo contribuyó a agravar la situación y provocó que durante las tres últimas jornada se superasen los 120 µg/m3, el detonante para aplicar medidas restrictivas al tráfico y así tratar de reducir la contaminación.
El corte del tráfico al centro implicaría que sólo podrán acceder al área restringida los autobuses, el transporte escolar, bicicletas, vehículos con tarjeta PMR, emergencias, vehículos de residentes y aquellos que dispongan del distintivo de cero emisiones y ‘eco’ establecido por la Dirección General de Tráfico. También podrán circular vehículos que presten servicios esenciales y servicios funerarios.
Por el contrario, tendrían vetado el paso los ciclomotores, las motocicletas, además de todos los vehículos que no están en el listado de excepciones, y tampoco podrán utilizarse los aparcamiento s de rotación que están en el interior del perímetro restringido, entre ellos el de la plaza Mayor, plaza de España y Portugalete.
El área restringida, lo que se conoce como la ‘almendra central, está delimitada por la calle San Quirce, Cardenal Torquemada, Avenida de Santa Teresa, calle Gondomar, Chancillería, Ramón y Cajal y Colón. La línea divisoria prosigue por la calle cardenal Mendoza, Pedro Barruecos, Alonso Pesquera, Plaza Cruz Verde, Labradores, Acibelas, Cadena, Vega, plaza España, calle Miguel Íscar, plaza de Zorrilla, Paseo de Zorrilla, calle San Ildefonso y Paseo Isabel la Católica.
De optar el Ayuntamiento por aplicar el cierre, los aparcamientos disuasorios serán gratuitos, incluidos aquí los de la Feria de Muestras, playa de las Moreras, calle la India, zona Reyes Católicos, Cuatro de Marzo, Calle de la vía y Paseo del Renacimiento.
A la vez, para facilitar la movilidad de los que se desplacen al centro, Auvasa tiene previsto aumentar los servicios de autobús disponibles hasta que bajen los niveles de contaminación. El incremento del servicio sería de un 5% aplicado en las horas punta en las líneas 6, 8, 1 y 2, con un dispositivo para emplear los refuerzos en aquellos recorridos que se precisen.
Para controlar que se cumplen las medidas restricitivas, en el caso de que al final lleguen a aplicare, Policía Municipal establecerá filtros de entrada en todos los accesos al área restringida y realizará controles aleatorios dentro de la zona que abarca el cierre.
La activación del plan de emergencia a causa de la contaminación por ozono es una medida recurrente en los últimos años, aunque de las 48 ocasiones en las que fue necesario hacerlo desde 2017 sólo en ocho se aplicaron medidas restrictivas para el tráfico, en algún caso limitada sólo a la reducción de la velocidad.
El año que más veces se activó el plan de emergencia fue el 2018, cuando se recurrió a esta medida en 18 ocasiones, 17 de ellas sin pasar del nivel 1, el de información a la población, mientras en otra se pasó al 2 y se limitó la velocidad, pero no se cortó el tráfico por el centro.
El ozono se encuentra en capa baja de la atmósfera es un contaminante de carácter secundario, aunque las emisiones de los vehículos contribuyen a incrementar su presencia en la atmósfera, a lo que se unen las altas temperaturas reinantes.