Valladolid venera al Corpus
Decenas de niños de Primera Comunión y 20 cofradías participan en la procesión por las calles
Decenas de niños y niñas volvieron a lucir ayer sus trajes y vestidos de Primera Comunión para participar en una multitudinaria procesión del Corpus Christi, por primera vez desde 2019 libre ya de toda restricción por la pandemia. Las calles del centro de Valladolid sirvieron de escenario de la devoción popular tras la misa oficiada a media tarde en la Catedral.
Una veintena de cofradías participó en el desfile procesional que transcurrió por las calles Arribas, Catedral, Regalado, Cánovas del Castillo, Fuente Dorada, Ferrari, Plaza Mayor, Pasión, Plaza Santa Ana, María de Molina, Héroes de Alcántara, Zúñiga, Santiago y Constitución, para volver por Regalado, Catedral y Arribas.
Acompañaron a la comitiva dos joyas artísticas de la Archidiócesis: el paso de La Sagrada Cena realizado por Juan Guraya Urrutia en 1958, y la Custodia de Arfe, montada en la carroza del paso Jesús de la Esperanza. Organizó la procesión el Arzobispado de Valladolid, la Adoración Nocturna y la Cofradía Penitencial y Sacramental de la Sagrada Cena, con el acompañamiento musical de la Banda de Cornetas y Tambores de la cofradía de la Sagrada Cena tras la Custodia.
Además de los niños que hicieron la Primera Comunión el pasado mes de mayo y las cofradías de Semana Santa, participaron en la multitudinaria procesión las parroquias, asociaciones religiosas, la Venerable Orden Tercera de Franciscanos, monaguillos, miembros del Seminario Menor y Mayor y sacerdotes diocesanos, entre otros. Todos ellos escoltaron la mitra y el báculo episcopal en el recorrido, y extendieron una colorida alfombra con pétalos de rosa.
La procesión del Corpus tiene lugar este año en un momento parecido a la ‘sede vacante’ de Roma, puesto que el cardenal Ricardo Blázquez preside la Archidiócesis en calidad de administrador apostólico mientras el nuevo arzobispo, Luis Argüello, aún no ha tomado posesión del ministerio.