Unanimidad del pleno para ensalzar al Bolaños político y su cercanía con la gente
Puente anuncia un gran homenaje y propone que el parque Juan de Austria lleve su nombre

Jesús Presencio, Pedro Herrero, Pilar Vicente, José Antonio Martínez Berm ejo, Óscar Puente, María Sánchez y Charo Chávez con la foto de Bolaños.-J.M. LOSTAU
Hacía mucho tiempo que los portavoces de todos los grupos con representación en el Ayuntamiento y el alcalde, Óscar Puente, no posaban juntos en una foto. El ambiente político municipal no está para poses de familia, pero la muerte del ex alcalde Tomás Rodríguez Bolaños propició ayer el encuentro de todos en torno al retrato del fallecido. Fue durante un pleno extraordinario, que empezó con un minuto de silencio y en el que los grupos aprobaro n una declaración institucional de agradecimiento a Bolaños y acordaron iniciar el proceso para su nombramiento como Hijo Predilecto de Valladolid y para concederle la Medalla de Oro a título póstumo.
Podrá decirse que la foto era obligada, y es verdad. Pero también lo es que la coincidencia de todos los intervinientes en sus elogios a la trayectoria política del fallecido, elegido alcalde en el complejo trance de la Transición, a su espíritu de consenso y su capacidad de diálogo, pero también al hombre afable y cercano con sus convecinos iba en serio; no era impostada.
En este marco general de acuerdo, luego cada uno puso el énfasis en lo que consideró más oportuno. El PP y Ciudadanos fueron los que más hicieron hincapié en la faceta de Bolaños como político dialogante, abierto al consenso, para lanzar un mensaje nada subliminal, muy directo, y comparar el talante del ex regidor fallecido con la situación que se vive ahora en el Ayuntamiento. El portavoz del PP, José Antonio Martínez Bermejo, destacó la «sabiduría política» de Bolaños, que utilizaba «con prudencia» y recordó la coincidencia de ambos «en la necesidad de volver a la política del diálogo y de acuerdos».
Con las relaciones entre PP y PSOE poco menos que inexistentes, el portavoz ‘popular’ dijo que «el encuentro político se produjo entonces y sería muy necesario ahora» para acabar su intervención con un «¡viva la concordia y el consenso!», aunque es posible que todo se quede en una declaración de intenciones y hoy, en el pleno ordinario, el de cada mes, la concordia y el consenso brillen por su ausencia.
La portavoz de Ciudadanos, Pilar Vicente, recordó el cariño demostrado a Bolaños por los miles de vallisoletanos que pasaron el sábado por la capilla ardiente instalada en el Ayuntamiento, pero se quedó, como una de las enseñanzas que deja, con «su talante político con aquel que no pensaba como él», un mensaje dirigido al alcalde, Óscar Puente.
Al no tener un conocimiento directo de la labor política del ex alcalde fallecido, la portavoz de Valladolid Toma la Palabra, María Sánchez, centró su intervención en la faceta humana de Bolaños. Recordó que no había encontrado a nadie «que tenga una mala palabra sobre el tipo de persona que era» y añadió que incluso desde la discrepancia política «la inmensa mayoría de Valladolid tiene un grato recuerdo de Tomás como alcalde».
Para el portavoz del PSOE, Pedro Herrero, el legado político de Bolaños llega hasta hoy y todas las corporaciones posteriores a su salida de la alcaldía en 1995 heredaron «la estructura y el sistema de gestión que sus equipos de gobierno fueron capaces de instaurar» Pero más allá de su trayectoria política, hizo también hincapié en el «cariño sincero» demostrado por los vallisoletanos a Bolaños, que además del «honor» de ser alcalde de su ciudad consiguió «otro superior: ser un alcalde querido».
Ausente de los actos de homenaje a Bolaños y de su sepelio por estar en el extranjero, en concreto en París, el alcalde, Óscar Puente, cerró el pleno con el discurso más largo de todos, en el que mezcló los recuerdos personales fruto de muchos años de relación con un recorrido por su trayectoria política y la enumeración de algunos logros durante su etapa de alcalde que todavía perduran, como la creación de la empresa Auvasa y la Sociedad Municipal de Suelo y Vivienda, VIVA. Y sin olvidar que el nuevo estadio José Zorrilla se inauguró al tercer año de ser alcalde.
Aseguró Puente que Bolaños «no ha tenido que morirse para ser reconocido»porque «lo era cada día en las calles de su Valladolid» y recordó que tuvo que afrontar «el inmenso reto» de dirigir una ayuntamiento «en el que casi todo estaba por hacer y había muy poco con lo que hacerlo», con «decenas de calles sin asfaltar y sin alumbrado público, precarios servicios públicos e inexistencia de dotaciones sociales y deportivas».
Añadió sobre su antecesor, primer alcalde socialista tras restaurarse la democracia, que fue «un gran político y un gran hombre» y contó que siempre le admiró la presencia en las asambleas del partido «años después de haber dejado todos los cargos» de alguien como Bolaños, que «lo había sido todo».
Como recuerdo al ex alcalde, propuso a todos los grupos que el parque Juan de Austria, cuya reapertura se prevé el próximo año, lleve su nombre por ser el último que inauguró y anunció que planteará también la celebración de un gran homenaje en una fecha por decidir.