El Ayuntamiento de Valladolid ultima la ampliación de la zona azul a Vadillos con 1.000 nuevas plazas

Hace ya años que el número de plazas de estacionamiento en zona azul, la ORA, como se conoce de forma coloquial, se mantiene en las 8.337 vigentes ahora, pero todo indica que antes de fin de año la cifra se ampliará en mil más, repartidas por once calles entre la plaza de Vadillos y la vía del tren.

La concejalía de Seguridad y Movilidad ultima la tramitación de la propuesta, con sus aspectos técnicos, para su aprobación en la junta de gobierno del Ayuntamiento, el penúltimo paso antes de que el concejal delegado del área, Luis Vélez, dé su visto bueno definitivo al no tener que pasar la decisión por el pleno municipal. Vélez confía en que esta ampliación de la ORA se materialice antes de fin de año, pero «si es enero no pasa nada», afirma el edil.

La concesionaria de la ORA, la empresa Dornier, ya trabaja sobre el terreno para la delimitación de las plazas y para decidir la ubicación de los parquímetros antes de que la línea azul de aparcamiento de pago se extienda a esta parte de la ciudad.

De las mil plazas nuevas, 800 serán con la tarifa normal de la ORAy las 200 restantes de aparcamiento disuasorio, más baratas y marcadas con línea naranja. La diferencia es sustancial. Dejar el coche durante todo el día en un aparcamiento disuasorio cuesta 2,65 euros, mientras el tiempo máximo permitido para aparcar en la zona azul es de dos horas y sale por 2,35 euros. Transcurridas las dos horas hay que cambiar el vehículo de sitio.

Las mil plazas se repartirán en un área comprendida entre la plaza Circular, la vía del tren y la plaza de los Vadillos. Son once calles y aquí están Veinte Metros, Industrias, Cistérniga, San Isidro, Palomares, Unión, Bailarín Vicente Escudero, Príncipe, un tramo de la calle La Vía, Juan Bravo y Marquesa de Esquilache.

Algunas de ellas son cortas, pero todas están muy solicitadas para aparcar al ser gratis y estar rodeadas de zonas de estacionamiento de pago. Es el conocido como ‘efecto frontera’, que se da también en otras partes de las ciudad que son límite de la zona azul.

La última ampliación de la ORA llegó hasta Pérez Galdós, pero entre esta calle y la vía del tren quedó una isla de aparcamiento libre. Para evitarse el pago del estacionamiento, los conductores tienden a aparcar en estas calles, con el consiguiente problema para los residentes, que se encuentran sin hueco para dejar sus vehículos. Fueron los vecinos los que plantearon en su día a Vélez la posibilidad de extender la zona azul hasta este rincón, propuesta que el concejal consideró razonable y que ahora está a punto de consumarse.

El contrato de la ORA, adjudicado a Dornier en 2016 después de varias prórrogas y de un complejo proceso que llegó a los tribunales, deja abierta la posibilidad de incrementar un 30% las 8.377 plazas de ahora, con lo que podrían crearse otras 2.500 y superar las 10.800 durante los 10 años de concesión.

La línea seguida en los últimos años fue, sin embargo, la de ampliaciones puntuales como la que ahora se realizará en el entorno de Vadillos.

Con esta política la línea azul del aparcamiento de pago se extiende por el norte hasta el comienzo de La Rondilla, mientras por la zona este el límite llega hasta la plaza de os Vadillos y por el sur en el barrio del Cuatro de Marzo. Con la creación de 200 plazas de aparcamiento disuasorio, el de Vadillos será el cuarto estacionamiento de estas características después de los de la Feria de Muestras es, con 500 plazas, el de Las Moreras, con unas 80 plazas, y el que existe junto a la Casa de la India, con 200.

El de la Feria de Muestras, el mayor, tiene una ocupación media diaria inferior al 50%.