El sector forestal pide paso

Una fuente de riqueza que permanecía dormida en Castilla y León comienza a despertar, igual que lo hizo en su día el sector del turismo a través de la excelencia de su oferta; o la vitivinicultura con sus Denominaciones de Origen, o el sector agroalimentario con potentes marcas de calidad. Ahora son los bosques los que reclaman un lugar destacado en la economía regional.

Y lo hacen de la mano del sector energético a través de la biomasa, un combustible caído en desuso en las ciudades desde hace generaciones. Reinventado y modernizado, vuelve a la primera línea de batalla para plantarle cara a los combustibles fósiles. No en vano la biomasa da trabajo ya a 2.500 personas en Castilla yLeón, una Comunidad que factura alrededor de 300 millones de euros con esta actividad.

Los agentes del sector quieren llamar la atención de la Administración regional para que tenga en cuenta las posibilidades de futuro de la biomasa. Castilla y León es la Comunidad autónoma con más superficie forestal, casi el 20% de la superficie total de España, lo que se traduce en casi cinco millones de hectáreas forestales de las 25 con que cuenta, a grandes rasgos, la geografía nacional.

También es líder Castilla yLeón en cuanto al tratamiento de esa masa para la fabricación de pellets. Si en España se consumen alrededor de medio millón de toneladas de pellet, más de 150 de ellas tienen la ‘Denominación de Origen’ de la Comunidad autónoma.

Avebiom

El presidente de la Asociación Española de Valorización Energética de la Biomasa (Avebiom), Javier Díaz, puso de manifiesto ayer todos esos datos durante una visita a varias instalaciones de la Comunidad. La entidad se constituyó en 2004 entre los principales actores del sector, con el fin de promover el desarrollo de la bioenergía en España.

Las 180 empresas que conforman hoy en día Abeviom suman 11.400 empleos directos en España, y un total de 2.200 millones de euros de facturación anual.El país cuenta con 160.000 instalaciones de biomasa para uso térmico y eléctrico. La producción de energía primaria a partir de biomasa se sitúa por encima del equivalente a cinco millones de toneladas de petróleo (ktep) al año.

Se trata de una energía que destaca por su capacidad de creación de puestos de trabajo, que se calcula multiplicando por 3 cada megawatio instalado. No sólo trabajos en el sector forestal propiamente dicho, sino también en el sector industrial, y en las actividades de operación y mantenimiento. En concreto, la biomasa genera empleo 60 veces por encima del gas natural, según datos de la asociación.

Díaz visitó la factoría de Naturpellet, en la localidad segoviana de Sanchonuño. Está ubicada junto a una fábrica de embalajes y palés que la provee de los subproductos de la madera que la planta emplea para sus pellets de alta calidad: serrín, viruta y astillas. Tras una serie de procesos se convierten en esos pequeños cilindros de uno o dos centímetros de largo, apelmazados con la propia lignina natural de la madera, que se emplean como una moderna ‘leña’ limpia en las calderas y estufas de biomasa.

«Es un combustible económico que que ha demostrado su buen comportamiento en el mercado incluso en momentos de gasoil con precios bajos», aseguró durante la visita el director de Naturpellet, Roberto Bravo. Apuntó que la Administración regional «lo tiene fácil para considerar el sector forestal como un sector estratégico».

Y es que, a su juicio, «aquí no va a venir ningún Silicon Valley». Sin embargo «tenemos la posibilidad de desarrollar mucho más la biomasa, que es un sector renovable, sostenible, que se vende bien y que es muy local, porque los bosques no tienen peligro de deslocalización». Naturpellet produce 40.000 toneladas al año, y factura 5 millones anuales. Pronto acometerá una ampliación hasta las 60.000 toneladas.