Amagar y no dar, estrategia contra Inés Arrimadas

Un importante director de un importante periódico que marcó la Transición aseguraba, en privado, eso sí, que la destreza en política y en periodismo era amagar y no dar. Pues esa es la tesis del ciudadano de Ciudadanos de Castilla y León que anda estos días de gira y ruta por digitales y otros medios de la Corte madrileña intentando a promocionando su presunta rivalidad contra la sucesora de Albert Rivera, es decir, Inés Arrimadas, seguramente la mejor parlamentaria del panorama parlamentario patrio. En eso está y anda el que fuera vencedor de las primarias de Castilla y León contra Silvia Clemente, avalada por el derrotado aparato. Cierto es que no se le pueden negar sus dotes de estratega. Creando clima, incertidumbre, insinuaciones y filtraciones, sean suyas, las filtraciones, o de su entorno, dígase el viceconsejero de la consejería del postulante, Fernando Navarro. De momento la opción sólo ha encontrado cierto eco en el sector crítico aglutinado en torno a los que emigrados de UPyD, ya sea el valenciano Toni Cantó o el asturiano Prendes. Los primeros desabordar el barco de Rosa Díez en cuanto apareció una fuga de agua, para abordar el de Rivera que apuntaba mejor travesía. Menos activo está y estará el vallisoletano Luis Garicano, muy asentado en su labor en la eurocámara y en perfecta sintonía con Arrimadas no parece estar para zarandajas. El caso es que, sea como sea, y vista la escasa aceptación que está teniendo la tentación crítica, por mucho que mediten y reflesionen, no presentará su alternativa quien ya fue alternativa. Pero es que entonces el riesgo era casi nulo y ahora el riesgo es elevado, y el cargo también. No se presentará contra la sucesora natural. Dicho queda. Y si no lo creen, ¡hagan sus apuestas¡ Para el sorteo del Niño.