Diario de Valladolid

Creado:

Actualizado:

SOBRE LA paramera leonesa, se levanta un enorme silo, a cuyo pie, chispeando la nieve, se reunieron los empleados de la editorial Everest, para gritar que su empresa es viable y que no se la cierren.

No es la primera industria de la Comunidad que tiene problemas, pero sí la primera que presenta un ERE, mientras Rajoy desvela fantásticas predicciones económicas preelectorales, a la vez que el petróleo y los intereses se desploman.

Nueve meses llevan negociando con la Junta, los propietarios y la representación laboral. Han visto pasar por delante a otras grandes empresas, que han logrado los favores de la Junta de Castilla y Castellón. Creen que su petición se está postergando, hasta que esta semana, con las nieves, ha llegado el lobo en forma de ERE.

Son muchas las empresas que ha salvado la ayuda “puntual” de la Junta: Fasa, Nissan, Norma, Lingotes, sin mencionar las de los ‘amigos políticos’, que es como Varela Ortega bautizó las corruptelas decimonónicas.

Los trabajadores de Everest se preguntan: ¿es que ya no usan libros los escolares?, ¿la cocina ya no está de moda?, ¿el turismo se ha terminado? No: los escolares usan sus libros de texto, y con la ‘pasmada’ de hacer una nueva ley, hay que hacerlos todos nuevos. Los Master Chef inundan teles y librerías, precisamente la especialidad de la editorial. El turismo es el único sector que ha crecido, y ellos venden más que Lonely Planet. Por ahí no está el problema.

Aún desconociendo cuál es el problema, está claro que la ayuda ha de ser en forma de dinero: ojo, prestado. Como la banca está escondida, la Junta lleva un cuatrienio promocionando sus ‘servicios financieros’: préstamos reembolsables, avales, ayudas a los parados de las grandes empresas, mediación, etc.

Parece que donde más frío hay ahora, no es en el Everest leonés, ni en el Campofrío burgalés, sino en algún despacho de Valladolid. En quince días tenemos Pleno y este es uno de los primeros asuntos que UPL va a llevar.

tracking