RESTAURANTE EL ENCUENTRO (LA ALBERCA, SALAMANCA)
Un guiño «pucherero» en el corazón de la «Toscana salmantina»

Ramón Sánchez y Maleni Gómez, en el comedor del restaurante albercano El Encuentro.
Ha pasado un año y Ramón Sánchez consolida su hueco en la cocina rural salmantina y lo hace en su tierra. Para un profesional de Tamames, de ahí lo de ‘pucherero’, es todo un logro conseguido no sin esfuerzo y oficio. Ramón ha currado en restaurantes representativos de la denominada ‘Toscana salmantina’, que es la Sierra de Francia. Maleni Gómez, su mujer y albercana, se ha hecho con la cocina y entre los dos están logrando definir una comanda con guiños de modernidad, pero sujeta a los platos que el turista y el comensal busca en los restaurantes locales.
La decoración de los bordados son el primer guiño cultural, unido a la moza de ánimas que te recibe al entrar bajo la ventana del comedor que da nombre al restaurante, pues es un punto obligado en el ‘encuentro’ en la procesión de Semana Santa. Sin renunciar a la sopa castellana ni a las patatas meneás ni a un buen guiso de alubias, Ramón no descarta en el futuro hacer un homenaje al cocido de Tamames. Pero tampoco al limón serrano, santo y seña del recetario tradicional, ni a las carnes rojas de raza morucha. Nobleza obliga en tierra de ibérico.
No falta un buen plato de jamón y abundantes platos de carne roja de cerdo ibérico, pluma, secreto, carrilleras. Por supuesto, chuletón y solomillo de ternera. Tablas de queso e ibérico obligadas. Carpaccio de morucha, perdiz escabechada y ensaladas variadas. Ramón y Maleni han acertado con la comanda y el lugar. Lo mejor de todo es que aportan oficio: Moncho ha demostrado los años de curre en la hostelería de su comarca, que es la mejor garantía para defender un restaurante en un escenario emblemático entre los conjuntos históricos de la región.
Los vinos de Arribes, bien representados y con mayor presencia, los tintos y blancos de la DOP Sierra de Salamanca, donde la rufete destaca en la carta. Un restaurante familiar de corte tradicional donde se puede comer por 35-40 euros. Un plato del momento que firma la cocinera es el de la ‘crema de coliflor con manzana confitada’. Un motivo más para visitar esa joya de la arquitectura serrana que es La Alberca.